El presidente electo, Jair Bolsonaro, consideró que Brasil es el país de los derechos, aunque sin empleo, y abogó por una mayor flexibilización de la legislación laboral como el camino para destrabar la economía, durante una transmisión en vivo desde su residencia en Río de Janeiro.
Un día después que concluyera su visita a Brasilia, donde encaminó la transición del Gobierno y se reunió con el actual mandatario, Michel Temer, Bolsonaro expresó que ”la Constitución está llena de derechos (laborales) y que en el país hay derecho para todo, solo que no hay empleo.
Los empresarios me vienen diciendo que nosotros tendremos que decidir: todos los derechos y desempleo o menos derechos y empleo, declaró Bolsonaro durante una transmisión en directo en su cuenta de Facebook. La declaración del presidente electo vino dos días después que anunciara su intención de extinguir el Ministerio del Trabajo, creado en 1930, la que fue inmediatamente criticada por sindicatos, por la justicia laboral y hasta por algunos empresarios.
Asimismo, a lo largo de la campaña electoral, Bolsonaro, líder de la emergente ultraderecha brasileña, capitán de la reserva del Ejército y elegido presidente en octubre pasado, ya había defendido una mayor flexibilización de las leyes laborales para estimular la economía del país, donde 13 millones de personas están paradas.
Respecto a la polémica reforma del sistema de pensiones, Bolsonaro dijo que todos deben entender que la situación de las jubilaciones está complicada y que los gastos del Gobierno con esa materia están subiendo de manera asombrosa. No queremos transformarnos en lo que fue Grecia hace poco, aseguró.
Bolsonaro también anunció que deberá indicar en la próxima semana algunos de los nuevos nombres que compondrán su gobierno y destacó que tiene especial preocupación por el Ministerio de la Educación, el que calificó de complicado.
Según dijo el presidente electo, su administración acabará con todas las cuestiones menores en la enseñanza, como la ideología de género, ya que, a su juicio, no es papel de la escuela enseñar sobre sexo. Quien enseña sobre sexo es papá y mamá y acabó. No hay que seguir discutiendo ese tema, pues los brasileños no quieren más eso y yo tampoco quiero, puntuó Bolsonaro.
El futuro jefe de Estado igualmente criticó las cuestiones abordadas en el multitudinario examen para la universidad que tuvo lugar el pasado fin de semana en Brasil, que trajo preguntas sobre movimientos sociales, feminismo, desigualdad y vocabularios específicos de minorías, como el colectivo LGBTI.
Bolsonaro garantizó que, en su gestión, intentará cambiar eso”, y que el llamado Examen Nacional de Enseñanza Media (ENEM) pasará a tener cuestiones que interesan el futuro de nuestra generación y no esas cuestiones menores. Ideología de género, ¿qué importancia tiene eso? Si uno quiere ser feliz al lado de otro hombre que vaya a ser feliz, pero que no quede molestando en las escuelas, expresó.
Finalmente, Bolsonaro caracterizó como quejidos las críticas recibidas por la supuesta cancelación de una misión comercial de funcionarios egipcios por su intención de mudar la embajada de Brasil en Israel de Tel Aviv a Jerusalén.
Estoy manteniendo conversaciones maravillosas con todos los países, fortaleciendo lazos de amistades y comerciales, declaró el presidente electo, quien además reiteró que algunos países están muy contentos con su elección, luego de que recibiera en su residencia particular a los embajadores de Argentina y Alemania.