Este martes 29 de mayo el parlamento del Mercosur se reunió en la sede del organismo en Montevideo para trabajar una Sesión Ordinaria. El parlamentario uruguayo y coordinador del Bloque de Integración Democrática, Pablo Iturralde, abrió una brecha para debatir sobre la situación democrática en Venezuela tras las elecciones del pasado 20 de mayo, las cuales considera “fraudulentas” y se leyó una nota firmada por 30 miembros del parlamento en la que exhorta a la comunidad internacional a “repudiar severamente estas conductas antidemocráticas”.
“El deterioro permanente que ha habido de la democracia en Venezuela, la falta de participación y de libertad de expresión del pueblo que ha llevado a presos, proscriptos, asesinatos. Todo eso ha sido una de las claves de manipulación en un país que necesita una ayuda de los derechos humanos”, expresó el parlamentario Iturralde luego de que ganara una moción para discutir el tema de Venezuela.
Según la nota del Bloque de Integración Democrática, la instrumentalización de los Poderes Públicos Nacionales de Venezuela por parte del gobierno de Maduro ha conllevado al desconocimiento de los derechos y garantías básicos por parte de un Estado abusador que niega la democracia e irrespeta a los Derechos Humanos.
La celebración de lo que el bloque considera un “fraude electoral” el pasado domingo, es un proceso “viciado de origen”. El bloque también que la crisis debe ser atendida por la comunidad internacional a efectos de ayudar al pueblo venezolano.
“En este sentido, los países del Mercosur debemos valorar, acompañar y vigilar la crisis venezolana por respeto a la democracia”, añade el pronunciamiento leído en la sede del organismo.
Al ser consultado por MercoPress sobre la sesión del martes, el parlamentario por Venezuela, Rafael Ramírez, señaló que “para nosotros como país es un éxito pues hoy logramos una mayoría parlamentaria con una votación de 28 a 14 para solo hacer la lectura de un documento de rechazo”. “Tu podrás decir que esto no es una moción, pero lo cierto es que la mayoría de los diputados presentes hoy en el Parlasur rechazaron la elección presidencial en Venezuela producto de ese documento, expresó Ramírez.
Para el miembro paraguayo del Parlasur, Eduardo Bernal, la postura del Bloque de Integración Democrática fue siempre la de apoyar la oposición al “régimen dictatorial de Maduro”. “Nosotros no estamos de acuerdo con esta farsa electoral que llevaron adelante para legitimar a un gobierno hambreador, dictatorial, que tiene cientos de pesos políticos ”Para ninguno de los países que integramos el Mercosur eso fue una elección. Esa fue solo una reunión del gabinete de Maduro en el cual hicieron un simulacro de elecciones”, refiriéndose a los comicios en los cuales la oposición venezolana no participó.
El parlamentario paraguayo añadió que la única solución posible a la crisis venezolana es “generar un comando militar de toda la América libre para extraer a Maduro y a su camarilla y llevarlo a ser juzgado por el tribunal de Roma por crímenes de lesa humanidad”.
“Estoy loco por la democracia; estoy loco por la libertad. Estoy loco porque de una vez por todas se terminen los carroñeros de la democracia, defensores de las dictaduras”, Exclamó Iturralde refiriéndose al bloque de parlamentarios que se opusieron a cambiar el orden del día, entre los cuales se encontraba la parlamentaria argentina Fernanda Gil Lozano que acusó a Iturralde de tener “problemas psiquiátricos”.
El documento fue firmado los integrantes del Grupo Político Integración Democrática, en que participan Parlamentarios de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
A continuación, la Declaración:
Montevideo, 29 mayo de 2018
En Venezuela cada día es más evidente el retroceso democrático, que se expresa con el desconocimiento de la Asamblea Nacional como órgano esencial del Poder Legislativo Nacional; la instrumentalización de los Poderes Públicos Nacionales por acción inconstitucional del Poder Ejecutivo; y el desconocimiento de los derechos y garantías básicos que amparan al ciudadano frente a la acción abusiva del Estado, culminando dicha situación en la celebración de un Fraude Electoral el pasado 20 de mayo de 2018, en un proceso viciado de origen, por tanto fue convocado por la ANC, que no es reconocida por el pueblo de Venezuela y la comunidad internacional.
Todas estas violaciones conforman una situación de negación de la democracia y de irrespeto a los Derechos Humanos que debe ser conocida y atendida por la comunidad internacional a efectos de contribuir con el bienestar social del pueblo venezolano. En este sentido, los países del MERCOSUR debemos valorar, acompañar y vigilar la crisis venezolana a la luz de las normas que el propio bloque mantiene sobre el respeto a la democracia. Los parlamentarios del Mercosur, reafirmando nuestro compromiso y vocación con la vigencia del sistema democrático y del Estado de Derecho, desplegamos esfuerzos continuos para fortalecer los sistemas pluralistas de gobiernos representativos.
Enmarcados en el reconocimiento de los Derechos Humanos, en tanto condición innegociable en las sociedades democráticas latinoamericanas, resaltamos la importancia de la solidaridad y vigilancia internacional para el desarrollo de los estándares básicos que garanticen la dignidad de las personas en nuestra región. Para ello, la comunidad internacional debe arbitrar las medidas pertinentes para trasladar la inquietud y preocupación generada por esta situación a toda autoridad Nacional y Regional, con el objeto repudiar severamente estas conductas antidemocráticas.