La crisis humanitaria se agrava en Venezuela, según un nuevo dato difundido que indica que 160 personas fallecieron por difteria en sólo dos años, según estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La enfermedad persiste en nueve estados, según el Boletín Epidemiológico de la OMS, a pesar que el gobierno de Nicolás Maduro insiste en que está controlada, informó en su portada online el periódico El Nacional. “El foco está activo desde hace 17 meses”, señala el reporte de la organización internacional.
En los últimos meses se acrecentaron en Venezuela las marchas y reclamos al gobierno de Maduro, recientemente reelegido para un nuevo mandato hasta 2025, a raíz de la falta de medicamentos, insumos médicos y atención a los enfermos.
La carencia de medicamentos, que según la Federación Farmacéutica venezolana llega a 80%, y la de otros insumos relacionados con la salud, conforman uno de los problemas más críticos para la actual administración.
En julio de 2016 emergieron los primeros casos de difteria, justamente a 24 años de haberse controlado la enfermedad que se previene con vacunación, detalló El Nacional. Hasta la fecha, 160 personas han muerto por esa enfermedad, hay 1.716 casos sospechosos y el mal continúa activo en nueve estados del país, dijo la OMS.
El 17 de abril pasado, en su penúltimo Boletín Epidemiológico, la OMS reportó 142 muertes desde 2016, de las cuales 22 corresponden a los primeros 4 meses del año 2018.
También notificó 238 casos de contagio desde enero hasta abril. El último boletín de fines de mayo evidencia que los fallecidos aumentaron de 22 a 40 y se cuentan 352 casos sospechosos acumulados para este año. El periódico venezolano afirma que las cifras superan las 81 muertes registradas en Haití desde 2014, cuando apareció allí la enfermedad.
La difteria es una infección aguda causada por la bacteria denominada Corynebacterium diphtheriae, que se propaga a través de flujos humanos, como los que se expulsan con la tos o los estornudos, de una persona infectada o de alguien que porte la bacteria pero que no tenga ningún síntoma.
La bacteria infecta más comúnmente la nariz y la garganta. La difteria causa cefalea, fiebre alta, dificultades para tragar y ganglios linfáticos inflamados en la zona del cuello. Además, se puede formar una membrana en la garganta. El mal se neutraliza principalmente con antibióticos, sin embargo, si la enfermedad empieza a producir una toxina que afecta al miocardio y al sistema nervioso -que puede producir lesiones cardiacas, parálisis o incluso la muerte- es necesario atacarla con un suero antitoxina. Debido a la vacunación generalizada de los niños, la difteria ahora es poco común en muchas partes del mundo. Los factores de riesgo para la difteria incluyen ambientes de hacinamiento, higiene deficiente y falta de vacunas.
En Venezuela, la difteria estaba erradicada desde 1992, pero en los últimos tiempos “se han reportado casos entre todas las edades grupos, aunque la mayoría corresponde al grupo de 1 a 49 años de edad, y la tasa de incidencia más alta ocurrió en el grupo de 5 a 19 años de edad”, según el informe de la OMS.
La difteria se reactivó en el estado Bolívar en julio de2016, pero fue en septiembre cuando el gobierno regional admitió la epidemia, lo que dejó en evidencia que había una baja cobertura de vacunación en los niños, dijo El Nacional.
Luego se notificaron casos en los estados Anzoátegui, Bolívar, Delta Amacuro, Monagas y Sucre y en 2017 la enfermedad se expandió a 22 entidades y el Distrito Capital con casos confirmados. La OMS asegura que aún en nueve estados la bacteria está activa, aunque no precisó cuáles.
El periódico también destaca que el ministerio para la Salud de Venezuela “no ha emitido información epidemiológica sobre la difteria, ni sobre las epidemias de sarampión y malaria que también se encuentran circulando de forma simultánea en el país.