América Latina y el Caribe crecerán un 2,6% de promedio entre 2018 y 2020, por debajo del crecimiento global, debido a los bajos niveles de inversión y productividad, indicó hoy el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) al presentar su informe macroeconómico.
Aunque la región latinoamericana vuelve a crecer, tras encadenar dos años de recesión, lo hace a un ritmo mucho más bajo que otras regiones, como Asia y la Europa emergente, que proyectan un crecimiento de 6,5% y 3,7%, respectivamente en ese mismo período.
La expansión latinoamericana, no obstante, es desigual: se espera que el Cono Sur (excluyendo a Brasil) presente un índice de crecimiento de 2,9% en 2018-2020, que México crezca al 2,7 % en ese trienio; y que Brasil lo haga un 2%.
“La buena noticia es que la mayoría de la región ha vuelto a crecer”, dijo José Juan Ruiz, economista jefe del BID, al dar a conocer la primera parte del reporte en el marco de la asamblea anual del organismo que se celebra estos días en Mendoza (Argentina).
Ruiz apuntó, que “el crecimiento no es lo suficientemente veloz para satisfacer los deseos de la creciente clase media” y recalcó que “el mayor desafío es aumentar los niveles y eficiencia de las inversiones para que la región se vuelva más productiva, crezca de manera más veloz y estable y resguarde a la región de ‘shocks’ externos”.
A la reunión anual de la institución financiera panamericana, que se prolongará hasta este domingo 25 de marzo, asisten centenares de líderes económicos y políticos de la región.