Expertos previnieron que el sistema alimentario del Reino Unido no está preparado para el impacto que pueda provocar la salida de la UE y se hundirá en el caos.
El estudio, publicado por la Unidad de Investigación de Políticas Científicas de la Universidad de Sussex, señaló que el Gobierno británico no brindó a los consumidores ningún tipo de información sobre lo que ocurrirá con la agricultura y la pesca tras el Brexit, y sugirió que un manto de silencio parece haberse extendido sobre el resto de la cadena alimentaria.
La industria minorista está pronosticando aumentos de precios de hasta 22% en los bienes importados si el Reino Unido opta por un Brexit duro”, indicó el informe, elaborado por tres de los principales analistas de política alimentaria y agrícola del Reino Unido.
El informe de 88 páginas que firman Erik Millstone, profesor de la Universidad de Sussex, Tim Lang, de la Universidad de Londres, y Terry Marsden, de la Universidad de Cardiff, concluye que dejar la Unión Europea plantea serios riesgos para los intereses de los consumidores, la salud, las empresas y trabajadores del sector alimentario.