MercoPress. South Atlantic News Agency
El gobierno de Raúl Castro permite la contratación directa de trabajadores rurales
¿Son suficientes las medidas económicas de Raúl Castro para alejarse del comunismo de línea dura? El gobierno cubano permite desde el viernes a los agricultores contratar trabajadores directamente, es decir sin pasar por las cooperativas, en un paso para dejar de lado estrictos controles de su economía e impulsar la producción de un país que importa más de dos tercios de sus alimentos. En otras áreas, como restaurantes, Cuba ya ha permitido que los dueños de pequeñas empresas contraten a su personal por el mismo mecanismo.
“El objetivo principal de las nuevas disposiciones es estimular la contratación directa de trabajadores directamente relacionados con el trabajo agrícola de manera ágil, ordenada y legal”, dijo la prensa estatal cubana.
En la presidencia de Raúl Castro, Cuba ha introducido una serie de cambios divergentes del comunismo radical, pero su ritmo se ralentizó en el último año, generando dudas sobre el verdadero compromiso con los ajustes.
La Revolución Comunista Cubana, encabezada por el fallecido hermano de Raúl, Fidel Castro, introdujo la Ley de Reforma Agraria en 1959, mediante la cual el 80% de las mejores tierras, que estaban en manos de propietarios extranjeros, se convirtieron en granjas de no más de 402 hectáreas, aunque la mayor permaneció bajo administración directa de funcionarios gubernamentales y no ha sido redistribuida.
Además de las grandes explotaciones expropiadas, se creó el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), presidido en un primer momento por el propio Fidel y la Ley de Reforma Agraria recibió estatus constitucional. La Segunda Ley de Reforma Agraria de 1961 redujo aún más el tamaño de la propiedad a 33 hectáreas. A sus arrendatarios se les reconocen ciertos derechos de propiedad.
