”No hay ninguna animosidad”, aseguró ayer la canciller Susana Malcorra al referirse a la relación entre el papa Francisco y el presidente Mauricio Macri, en medio de la polémica por la devolución de los fondos que el Gobierno argentino había destinado a la fundación papal Scholas Ocurrentes.
Ese aporte de 16,6 millones de pesos fue calificado como “un acto escandaloso” en el entorno papal, ya que, según interpreta Su Santidad, Argentina atraviesa “un momento muy jorobado para los humildes”, aseguró uno de sus interlocutores en la organización.
La ministra argentina de Relaciones Exteriores calificó como “muy rica” y “natural” la conversación, de más de una hora, que mantuvo ayer con Francisco en la residencia de Santa Marta. “Fue una conversación muy rica, muy natural, donde no hubo ningún pase de facturas, ni enormes diferencias filosóficas”, señaló a la prensa.
En esa conversación, el diálogo entre Francisco y Malcorra abordó temas “del país de manera constructiva y positiva”, dijo la funcionaria, quien viajó a Roma para participar de una reunión del Programa Mundial de Alimentos (PMA).
“Como suelo decir, en la Argentina hay una suerte de ‘pupología’, así como una necesidad de tensionar todo y de plantear una oposición amigo-enemigo”, ensayó la postulante a encabezar la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Se refirió, obviamente, a uno de los deportes preferidos por los argentinos: creer que el país es el ombligo del mundo y todo gira en su entorno.
De modo paralelo, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, admitió que situaciones como las ocurridas con la devolución de los fondos “nunca son buenas” y generan “incomodidad”, mientras que el director de la fundación Scholas, José María del Corral, atribuyó la devolución a la “falta de claridad política”.
También, el consultor del Pontificio Consejo Justicia y Paz, Juan Grabois, afirmó que Francisco “no pidió una donación”.
“Nunca son buenas estas idas y vueltas para nadie. Generan incomodidad y siempre es mejor evitarlas. No existe conflicto con el papa Francisco y menos con Scholas “, explicó Peña, hombre fuerte del gobierno macrista.
Del Corral coincidió, en cierto modo. Aseguró que es “absolutamente mentira” que exista bronca personal del Sumo Pontífice con el presidente Macri, y cuestionó que “todo es interpretado de manera intencional”.
“Cuando fue todo el lío de la Conmebol, Scholas suspendió el ingreso de dinero, y era mucho más que esto. Ahora, frente a esta falta de claridad política, se vuelve a hacer lo mismo. Acá lo que se busca es la transparencia y la claridad del Papa. No es una ONG más, es la fundación del Papa”, explicó el interlocutor vaticano.
Aseguró que “el Papa está agradecido al Presidente por el decreto que se firmó”, porque le da “estabilidad” a la sede en el país.