La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se emocionó visiblemente este viernes al despedir con elogios a su par argentina Cristina Fernández, en la que estaba destinada a ser su última cumbre del bloque Mercosur.
”Esta es una de las últimas reuniones a las que asistirá la querida presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la condición de dirigente máxima de su país”, declaró Rousseff durante la reunión con los otros mandatarios.
“En estos ocho años en que le tocó presidir la nación argentina todos fuimos testigos de cómo mi querida amiga y presidente imprimió conducción libre y democrática a su país”, añadió durante su aplaudida intervención.
Más tarde, Rousseff condecoró a Cristina Fernández con la Orden de la Cruz del Sur, la mayor distinción que puede recibir un extranjero en Brasil.
Rousseff ofició de anfitriona del encuentro en Brasilia y Cristina Fernández dejará el poder de Argentina en diciembre de este año, tras ocho de gobierno que comenzaron cuando sucediera a su fallecido marido, Néstor Kirchner. Por mandato constitucional la presidenta argentina no puede ser reelecta por tercera vez consecutiva.
“Desde el punto de vista personal, desde el punto de vista político, quiero decirle Cristina que tendrá aquí en Brasil a una amiga siempre dispuesta para recibirla y para juntas compartir nuevamente y sistemáticamente nuestros sueños y nuestras esperanzas”, añadió Rousseff, con lágrimas en los ojos.
No obstante, sobre el cierre del evento, el presidente de Paraguay, Horacio Cartes, anticipó que podría haber una nueva cita de presidentes del Mercosur en agosto en Asunción.
Sus palabras fueron aplaudidas en el recinto donde se desarrolla el plenario de la cumbre del Mercosur que busca reavivar el aletargamiento que vive el bloque integrado por Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay y Venezuela y que tiene a Bolivia finalizando su proceso de adhesión.