La Comisión Europea (CE) advirtió de que en el último año han aumentado las medidas que obstaculizan el comercio internacional, en especial en Rusia, China, India e Indonesia, pero también menciona al Mercosur --Argentina y Brasil -- además de México y Ecuador.
De acuerdo con la CE, entre junio de 2013 y julio de 2014 se han identificado 170 nuevas medidas de restricción al comercio, según el informe anual sobre barreras al comercio publicado este lunes.
Para la CE es incluso más preocupante que se hayan retirado solamente 12 medidas previamente identificadas, en comparación con las 18 del año anterior.
Rusia lidera el ranking de estas medidas con 32, seguida de China con 23, India con 16, Indonesia con 14 y Argentina con 13. De los demás países latinoamericanos analizados, Brasil introdujo cuatro medidas restrictivas y Ecuador y México tres.
En general, en el periodo de referencia se han adoptado 77 restricciones fronterizas tanto en las importaciones como exportaciones, lo que supone el 45 % de todas las nuevas barreras identificadas por la CE.
En el caso de Brasil, la CE indica que ha incluido en la lista de cien excepciones a las tarifas externas comunes de Mercosur seis nuevas líneas cuyas tarifas aumentaron hasta un 20%.
Al mismo tiempo eliminó otras seis posiciones tarifarias de la lista con la consecuencia de que las tarifas aumentaron para ciertos bienes de exhibición o demostración y para un compuesto adhesivo de uso múltiple a base de vinilo.
En la misma línea, Argentina ha prolongado un año la aplicación de cien exenciones adicionales de las tarifas externas comunes de Mercosur y ha retirado cinco líneas tarifarias de la lista y puesto otros cinco en su lugar.
El ministerio de Economía de Argentina ha sometido la Declaración Jurada de Composición de Producto sobre textiles y calzado importado a un sistema aduanero electrónico, lo que significa una revisión por varias agencias gubernamentales que pueden emitir “observaciones”, que provocan retrasos o denegaciones.
Buenos Aires también ha seguido imponiendo la obligación de la Declaración Jurada Anticipada antes de cada operación de importación, que “sigue siendo de lejos la medida más obstructiva al comercio adoptada por Argentina”, indica la Comisión.
Finalmente, Argentina también ha adoptado una serie de valores arbitrarios de referencia para importaciones y exportaciones de una gama de productos.
En cuanto a las medidas no arancelarias detrás de la frontera, la CE ha detectado en general 65 nuevas barreras, siendo 34 de carácter técnico, tributario o de ubicación local, un aumento sin precedentes del 50 % en los últimos seis años.
En el caso de Argentina, ese país ha impuesto un “gravamen de lujo” de hasta el 50 % sobre bienes como coches, barcos, aviones o motos, que afecta a los modelos importados con mayor alcance que los nacionales.
La CE destaca que Brasil ha introducido un número menor de barreras no arancelarias que operan detrás de la frontera en esta ocasión, pero los programas que favorecen la adaptación local de la producción y que garantizan ventajas a exportadores brasileños permanecen en vigor.
Por otro lado, este año se han dado menos medidas restrictivas en las licitaciones públicas (17), pero en el caso de Brasil la CE observó distorsiones en las condiciones, al ofrecer preferencias de precio a ciertos bienes tecnológicos producidos localmente.
En las barreras a los servicios e inversiones, la CE identificó este año 14, una cifra similar a la del informe anterior y comparable a la media de los últimos seis años.
En este capítulo la CE menciona el aumento del impuesto de retención al 35 % adoptado por Argentina en diciembre de 2013 a ciertas compras de bienes y servicios por parte de los argentinos en el exterior y la extensión de la medida a la compra de moneda extranjera en viajes al exterior.