El jefe de gabinete del Gobierno argentino, Jorge Capitanich, rechazó las previsiones económicas para Argentina del Fondo Monetario Internacional (FMI), que pronostican que el país terminará en recesión en 2014 y 2015, y estimó que finalizará este año con un leve crecimiento.
Disentimos profunda y certeramente respecto a estas estimaciones, recalcó Capitanich durante su rueda de prensa diaria, en referencia a las conclusiones del informe bianual Perspectivas Económicas Globales, publicado por el FMI.
En esta publicación, el organismo pronostica una contracción de la economía argentina del 1,7% para 2014 y un decrecimiento del 1,5% para 2015.
El FMI también prevé una subida del desempleo, que actualmente registra una tasa del 7,1%, hasta el 8,8% a finales de este año y hasta el 9% en 2015.
Capitanich sostuvo que el Producto Interior Bruto (PIB) tendrá entre 0 a 0,5% de crecimiento en el transcurso del 2014, según las previsiones del Ministerio de Economía.
”El Gobierno argentino considera que la tasa de crecimiento del PIB para el año 2015 es la que estipula el Presupuesto Nacional (...). Esto estipula 2,8% del crecimiento del PIB, dijo el jefe de ministros.
Estas son las predicciones y los pronósticos que ha formulado el Ministerio de Economía y que mantiene y sostiene el Gobierno argentino”, subrayó.
Capitanich cuestionó las previsiones del FMI esgrimiendo que el organismo falló en la predicción de la reciente crisis económica de 2008 y aseguró que las recomendaciones del fondo en la década de 1990 desembocaron en la grave crisis argentina de 2001 y 2002.
Además, confirmó que el ministro de Economía Axel Kicillof viaja a Washington, donde esta semana se reúnen los gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y donde tendrá lugar la asamblea conjunta del FMI y el Banco Mundial a partir del viernes.