El juez estadounidense que lleva el caso del litigio presentado por varios fondos de inversión contra el gobierno de Argentina calificó el jueves como “inválida e ilegal” la última propuesta anunciada desde Buenos Aires.
El magistrado Thomas Griesa, en una audiencia sobre el caso llevada a cabo el jueves en los tribunales de Nueva York, dijo además que la propuesta, que tiene que estudiar el Parlamento argentino, está en violación de las órdenes dadas por la Justicia estadounidense.
El gobierno de la presidenta Cristina Fernandez quiere llevar a Argentina los pagos de los bonos que fueron reestructurados en 2005 y 2010 para evitar el bloqueo de desembolsos que se mantiene en Estados Unidos a partir de una demanda presentada en Nueva York por fondos especulativos.
El juez ordenó al gobierno de la presidenta Cristina Fernández no llevar a cabo la iniciativa de abonar al 100% de los tenedores de bonos argentinos en Argentina, una medida con la que Buenos Aires busca evitar el bloqueo judicial de sus pagos en Estados Unidos. Se trata igualmente de una medida que sería, de ser aprobada por el Congreso, de adhesión voluntaria.
Griesa rechazó el pedido de los abogados de los fondos especulativos, que consideraron que declarar al país suramericano en desacato serviría de estímulo para que aceptara las órdenes de la corte, que en 2012 falló a favor de los grupos financieros.
Griesa simpatizó con los alegatos de los abogados acusadores, señalado que Argentina ha pasado años defendiendo una posición de ilegalidad.
Pero dijo que considera que una declaración de desacato contra Argentina no ayudaría a alcanzar un acuerdo, que a su juicio es la única solución a la larga batalla legal.
La iniciativa del traslado del pago de la deuda fue presentada el martes en cadena nacional por Cristina Fernández y enviada a evaluación al Congreso donde el gobierno cuenta con mayoría.
Argentina venía pagando en Nueva York los vencimientos de su deuda con 93% de los acreedores que aceptaron los canjes de bonos en 2005 y 2010, con quitas de hasta 70% del valor nominal de los títulos.
Pero el último depósito en julio de 539 millones de dólares a favor de esos tenedores de bonos reestructurados fue bloqueado en el Bank of New York (BoNY) por orden de Griesa, porque Argentina incumplió su sentencia que la obliga a pagar a los fondos especulativos, que Buenos Aires llama buitres porque compraron la deuda en default. El vencimiento expiró y el país fue colocado por calificadoras de riesgo en la categoría de default selectivo.