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Dilma furiosa con el 'pesimismo inadmisible” respecto a la economía brasileña
“(La inflación) está en el techo de la meta. Vamos a quedarnos en ese techo de la meta”, destacó la presidenta. La presidenta brasileña Dilma Rousseff denunció que existe un “pesimismo inadmisible” en torno a la economía brasileña, que comparó con las críticas que Brasil recibió durante el Mundial de fútbol 2014.
“El mismo pesimismo (que hubo) en el Mundial se está dando ahora con la economía, pero es aún más grave porque la economía está hecha de expectativas”, comentó Rousseff en una entrevista con medios locales transmitida a través de internet.
La jefe de Estado subrayó que Brasil se encuentra entre los 6 ó 7 países del G20 (emergentes) que más crecieron en 2013 (2,3 %) y negó que la inflación en el país esté “descontrolada”.
Los expertos del mercado financiero esperan para 2014 una inflación del 6,41 %, muy próxima al límite máximo tolerado por el Gobierno. La meta para la inflación en el país es del 4,50 %, con un margen de tolerancia de dos puntos porcentuales, lo que permite un máximo del 6,50 %.
“(La inflación) está en el techo de la meta. Vamos a quedarnos en ese techo de la meta”, destacó la presidenta.
Rousseff también se refirió a un informe enviada por el banco Santander a algunos clientes en el que transmitió la opinión de un analista sobre el posible empeoramiento de la situación económica del país en caso de una eventual reelección de la actual presidenta, algo que consideró “inadmisible”.
“Un país no debe aceptar una interferencia de cualquier integrante del sistema financiero de forma institucional en la actividad electoral y política”, afirmó Rousseff, quien precisó que “el pedido de disculpas del banco fue bastante protocolario”.
La jefe de Estado recordó que en 2002 “no les fue bien” a quienes apostaron en el mercado contra la entonces elección de Lula da Silva como presidente de Brasil.
