A casi dos años de la firma del acuerdo de libre comercio con Estados Unidos el gobierno colombiano resaltó los beneficios económicos obtenidos entre los cuales la creación de puestos de trabajo y la seguridad sindical. El informe también muestra que Mercosur ha perdido terreno como abastecedor de Colombia.
El ministro de Trabajo de Colombia, Rafael Pardo mencionó entre los logros la formalización de más de 530.000 puestos de trabajo, y 90.000 conciliaciones logradas en temas de conflictos laborales.
La cartera laboral colombiana ya inició 394 investigaciones administrativas por actos aleatorios contra el derecho de asociación, e impuso 68 sanciones. Y además le trasladó a la Fiscalía General un total de 233 actuaciones administrativas.
El ministro afirmó que hemos visto que el número de crímenes contra sindicalistas se ha reducido, pero por supuesto el Gobierno no estará satisfecho hasta que este número sea cero.
Pardo reveló que actualmente son 650 los gremialistas que cuentan con protección permanente, de los cuales la mitad tienen fuertes medidas de seguridad que incluyen vehículos y grupos de escoltas (guardaespaldas).
Colombia y Estados Unidos pusieron en marcha su Tratado de Libre Comercio (TLC) el 15 de mayo de 2012, luego de una década de negociaciones, lapso en el que funcionó la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas, ATPDEA.
Las importaciones colombianas de EEUU alcanzaron los 26.200 millones de dólares y crecieron alrededor del 27,1% en estos 20 primeros meses de vigencia del TLC con respecto al período anterior, debido a que la nación norteamericana logró un acceso preferencial y le ganó terreno a anteriores proveedores de Colombia como los integrantes del Mercosur y Canadá.
De estas importaciones más del 90% son bienes de capital, materias primas y bienes intermedios, mientras que el 80,7% de esas mismas no se producen en Colombia. Por esto último, el ministro de Comercio, Industria y Turismo colombiano, Santiago Rojas, destacó que EEUU tiene un mercado más complementario que competidor y desestimó las críticas al TLC procedentes del sector agrario.
Cuando subieron los pagos agrícolas los productores encontraban costos deprimidos u altos precios de producción, por lo que era fácil culpar a los TLC, pero en realidad las cifras de las importaciones en productos sensibles no presentan problemas, argumentó Rojas.
A su vez, la oferta colombiana se diversificó y exportó 305 nuevos productos a Estados Unidos, mientras que 1.609 empresas le vendieron por primera vez a esa nación.
A menos de dos meses para que el TLC cumpla su segundo aniversario Colombia se ha convertido en el cuarto país del mundo que más exporta a Estados Unidos por detrás de Canadá, México y Corea del Sur. Algo que Rojas considera como un signo positivo de cara al desarrollo de la relación comercial entre ambos países del continente americano.