El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunció el jueves por la noche que los mandatarios y cancilleres de países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se reunirán la próxima semana en Chile, durante la visita por la asunción de Michelle Bachelet, para examinar la situación de Venezuela.
Finalmente va haber una reunión de presidentes, finalmente va haber una reunión de cancilleres, pero para tener esa iniciativa primero consultamos al gobierno venezolano por elemental cortesía, informó Correa, quien tiene programado viajar a Santiago para la toma de posesión este martes.
¿Cuál es la solución para Venezuela? Respetar el Estado de derecho, respetar al gobierno legítimamente elegido. En el caso del Gobierno, aplicar la ley, respetando los derechos humanos, pero aplicar la ley, manifestó en una entrevista televisiva.
Nosotros vamos a tomar partido en base a la verdad, y la verdad es que el acosado es el gobierno legítimo de Venezuela, que Nicolás Maduro es humanista, jamás va a ser capaz de reprimir a su propia gente y que tratan de desestabilizarlo. Que se logre la paz en Venezuela, explicó el amigo y aliado del mandatario chavista.
El 22 de febrero pasado, Correa había hecho un llamado a la paz en Venezuela y culpado a la prensa de manipular la información sobre las protestas. Se está tergiversando lo que pasa en Venezuela, hay toda una maquinaria y nada es gratuito, sentenció.
Sostuvo que en Caracas dentro de esas protestas hay gente pagada, con financiamiento exterior, que busca desestabilizar al gobierno legítimo de Nicolás Maduro.
El miércoles pasado, Maduro anunció que rompió las relaciones políticas y diplomáticas con Panamá, a cuyo gobierno acusó de propiciar una intervención extranjera por solicitar un debate en la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre las protestas, que ya suman por lo menos 22 muertos.
Correa condenó la iniciativa panameña. Imagínense la insolencia de un país, sin consultarle al gobierno involucrado, al decir que hay que llevar el caso Venezuela a la OEA, expresó. Conocemos a Nicolás Maduro y sabemos que es incapaz de ser represivo, y conocemos a cierta derecha fascista de Venezuela, agregó.
Las protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro comenzaron a principios de febrero, convocadas por estudiantes tras un intento de violación en un campus. Luego se sumaron sectores de la oposición y se extendieron a todo el país incluyendo reclamos por la inseguridad, la inflación y la recurrente escasez de bienes básicos.
La violenta represión contra las movilizaciones ha dejado 22 muertos, casi 300 heridos y decenas de denuncias de violaciones a los derechos humanos.