Las protestas sindicales impidieron que la Fragata ARA Libertad atracara a horario, las medidas sindicales paralizaron la producción de neumáticos y las medidas laborales provocaron la cancelación o el aplazamiento de varios vuelos este martes en los dos aeropuertos de Buenos Aires, así como en otras terminales aéreas del país.
Unos 4.500 vuelos comerciales fueron cancelados o reprogramaron durante el fin de semana en todo el mundo debido a que las tripulaciones se vieron afectadas por la variante Ómicron del coronavirus, lo que dejó a las aerolíneas sin personal para manejar la repentina crisis.
Los servicios de las aerolíneas de pasajeros están regresando gradualmente a niveles prepandémicos, y tres aerolíneas ya anunciaron nuevas rutas y frecuencias el martes.
Peter Cerdá, vicepresidente regional para las Américas de IATA, señala que muchos países de América Latina y el Caribe se están acercando al medio año de suspensión de operaciones, “algo nunca antes visto”, pues destaca que no generar ingresos y tener que seguir cubriendo los costos durante un período de tiempo tan largo es una lucha por sobrevivir para cualquier industria.
American Airlines no se quedó con los brazos cruzados y anunció su primer contraataque al acuerdo que Delta -el mayor competidor de la firma norteamericana- llegó con Latam Airlines, y con el que la aerolínea chileno-brasilera dio por terminado su Joint Bussines Agreement (JBA) con AA.
La aerolínea iraní Mahan Air, la segunda más grande del país, inauguró el lunes oficialmente un vuelo directo entre Teherán y Caracas, en una muestra de las estrechas relaciones entre Irán y Venezuela, ambos países bajo sanciones de Estados Unidos.
LATAM Airlines, el mayor grupo de transporte aéreo en América Latina, duplicará sus operaciones en Colombia en los próximos tres años como parte de un plan que demandará inversiones por 300 millones de dólares, anunciaron el lunes directivos de la aerolínea.