La firma Ford revisará alrededor de tres millones de vehículos en Estados Unidos y Canadá que equipaban airbags defectuosos del fabricante Takata, lo que tendrá un coste para la compañía de Michigan de 610 millones de dólares.
La planta uruguaya Takata, fabricante japonesa de airbags, que se ha declarado en quiebra en Estados Unidos y Japón, seguirá operando normalmente, explicó el gerente de Takata Uruguay, José Enrique Alonso.