El empresario implicado en la red de corrupción de la petrolera estatal brasileña Petrobras ratificó que esa trama se robusteció a partir de 2004, cuando era presidente Lula da Silva (2003-2010).
Fiscales brasileños acusaron formalmente el lunes al tesorero del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) y a otras 26 personas por actos de corrupción ligados a la compañía estatal Petrobras, en un nuevo golpe contra la presidenta.
El ejecutivo de la constructora Toyo Setal, Augusto Ribeiro de Mendonça Neto denunció que los pagos de sobornos a los directivos de Petrobras eran rutinarios para quienes firmaban contratos con la compañía brasileña, y que quienes se beneficiaban de esos negocios formaban un club.