El gobierno de Alberto Fernández libra su primera gran batalla parlamentaria del momento que el programa para afrontar la dramática situación económica argentina contiene varios puntos que otorgan al poder Ejecutivo un poder casi total. Y la oposición no está dispuesta a transigir ante lo que considera rasgos de autoritarismo.
Sindicatos y organizaciones sociales de izquierda se reunieron el viernes ante el edificio del Congreso en Buenos Aires para expresar su apoyo a un proyecto de ley que, de ser aprobado, crearía un millón de empleos formales. Las agrupaciones detrás de la medida procuran que su iniciativa vea la luz antes del receso legislativo que comienza el 1 de diciembre.