Los ocho candidatos a la presidencia de Ecuador protagonizaron un debate político saturado de planes de gobierno apenas enunciados, salpicado de ataques y replicado en las redes sociales. Se trató del primer encuentro de los presidenciables ecuatorianos que se disputan el cargo que dejará vacante Rafael Correa tras diez años de ejercicio, y que se presentó como una oportunidad para convencer a los indecisos.
A escasos días de que elijan a su nuevo presidente, un tema ha dominado la atención de los ecuatorianos en las últimas semanas: la corrupción y los posibles vínculos de quién es y podría continuar como su vicepresidente.
El candidato del oficialismo, Lenín Moreno, y el opositor Guillermo Lasso avanzarían a una segunda vuelta en la elección presidencial del 19 de febrero en Ecuador, mostró el sondeo publicado esta semana. Moreno, un político de 63 años que cuenta con el respaldo del presidente Rafael Correa, obtendría un 38,6% de los votos válidos, según una encuesta de la firma Cedatos realizada entre el 3 y 8 de febrero a 6.490 personas.
Ecuador entra oficialmente este martes en la campaña proselitista para las elecciones del 19 de febrero, en las que se elegirá al sucesor del presidente Rafael Correa, en el poder desde 2007 y por primera vez en la última década fuera de la contienda.
El movimiento oficialista ecuatoriano Alianza País (AP), que lleva una decena de victorias electorales consecutivas desde 2006, proclamó el sábado al carismático ex vicepresidente Lenín Moreno (2007-2013) como candidato presidencial para comicios de 2017.