En una asamblea pública celebrada este mes en las Falklands, una suerte de ejercicio de democracia directa, y a la que asistieron seis de los ocho legisladores electos de las Islas, quedó claramente expresado un consenso mayoritario de que no hay desesperación por un segundo vuelo comercial al continente y mucho menos si es que está prevista una escala en Buenos Aires.
El semanario de las Falklands, Penguin News, ha recogido una serie de opiniones, variopinto, sobre el comunicado de la semana pasada en el cual el gobierno de las Islas informó sobre los avances alcanzados para el establecimiento de un segundo vuelo comercial desde las Islas a terceros países.
El gobierno electo de las Falklands no está bajo presión alguna del gobierno del Reino Unido para acordar algo que no sea de su mejor interés y la decisión final sobre vuelos adicionales al continente sudamericano será nuestra y sólo nuestra, aunque las Islas no se hacen ilusiones en cuanto al reiterado reclamo argentino de soberanía.