MercoPress. South Atlantic News Agency
Falklands con poca urgencia por un segundo vuelo y rechazan escala en Buenos Aires
Los Isleños rechazan de plano una escala en Buenos Aires 
El actual vuelo de LATAM, de los sábados es intocable En una asamblea pública celebrada este mes en las Falklands, una suerte de ejercicio de democracia directa, y a la que asistieron seis de los ocho legisladores electos de las Islas, quedó claramente expresado un consenso mayoritario de que no hay desesperación por un segundo vuelo comercial al continente y mucho menos si es que está prevista una escala en Buenos Aires.
Como era de esperar fueron los Isleños más viscerales contrarios a contactos con Argentina que llevaron la voz cantante, a pesar de los esfuerzos de los legisladores por afirmar que recién se estaba en el proceso de selección de aerolíneas interesadas en un segundo vuelo comercial, a cargo de una consultora privada experta en el tema, y por tanto las “líneas rojas” a no cruzar, políticamente, se decidirían luego de recibir el informe, y exclusivamente por los legisladores electos.
Empero, presionados en el intercambio y alentados por los aplausos de los presentes, uno tras otro de los legisladores tuvo que admitir que efectivamente si Buenos Aires iba a ser aeropuerto de escala para el segundo vuelo a un tercer país, la respuesta era decididamente un gran NO.
Igualmente se descartó, aunque con menor fuerza la opción de Comodoro Rivadavia, pues traía rememoraciones de los años setenta cuando LADE se encargaba del vínculo aéreo desde y hacia las Falklands, y los Isleños sospechaban que el Foreign Office tenía en mente entregarlos gradualmente a Argentina. Fue una década difícil para las Islas, y de mucha emigración.
También se insistió y así fue apoyado por los legisladores que un segundo vuelo comercial no significaría la eliminación del actual vínculo con Chile vía Punta Arenas que semanalmente realiza LATAM, al cual se han acostumbrado y a total satisfacción de los Isleños.
En tanto alguno de los legisladores argumentaron que había suficiente espacio comercial como para un segundo vuelo semanal, otros fueron más directos y dijeron que era obvio que si aprobar un segundo vuelo significaba el fin de LATAM, ni se discutía el tema. Vale recordar que cuando en 1999 se aprobó el actual sistema semanal en ese entonces de Lan Chile, con una escala mensual en Rio Gallegos, también despertó gran resistencia y hasta actos de patoterismo en las Islas, por temor a una invasión de visitantes argentinos, pero rápidamente se diluyó.
En definitiva no hay urgencia por un segundo vuelo a nivel ciudadano, se rechaza de plano una posible escala en Buenos Aires, no se interfiere con el actual servicio de LATAM, y si una vez recogida toda la información relativa a las aerolíneas interesadas en un segundo vuelo comercial no satisfacen, “los Isleños se levantarán de la mesa de negociaciones”.
Dicho esto debemos agregar que los grupos empresariales de las Falklands vinculados al comercio exterior, turismo, agricultura entre otros están interesados en el segundo vuelo comercial con algunas condiciones, pero mucho menos exigentes que las expresadas en la asamblea pública.
