El ministro de Defensa de Ecuador reivindicó hoy la decisión tomada por el gobierno de Rafael Correa para que las Fuerzas Armadas apoyen a la policía en el combate al crimen organizado y la delincuencia, trayendo a la palestra una dilatada controversia en América Latina respecto a si los militares deben cumplir dichas funciones.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunció una reducción de un 18% del número de efectivos de las Fuerzas Armadas antes del 2025 ante el “improbable escenario de una guerra convencional”. Ecuador libró su última guerra en 1995 con Perú, país con el que mantenía hasta entonces una vieja disputa territorial que se saldó con el pacto de paz de 1998.