El ministro de Defensa de Ecuador reivindicó hoy la decisión tomada por el gobierno de Rafael Correa para que las Fuerzas Armadas apoyen a la policía en el combate al crimen organizado y la delincuencia, trayendo a la palestra una dilatada controversia en América Latina respecto a si los militares deben cumplir dichas funciones.
No vamos a volver a pensar en la guerra con Perú ni con Colombia, pero hay otras amenazas, señaló Fernando Cordero Cueva en una entrevista con el canal Teleamazonas.
Ecuador se disputó territorios hasta 1995 con Perú, y en 2008 movilizó tropas tras un ataque militar colombiano contra un campamento guerrillero de las FARC, lo que fue considerado por Quito como una violación a su soberanía. Pero estas reyertas han quedado atrás, por lo que el Gobierno ecuatoriano parece buscar darles un nuevo papel a los militares mediante una enmienda constitucional.
Cordero aseguró que los mayores conflictos que enfrenta el país actualmente son el narcotráfico y los ciber-ataques y explicó que la Constitución vigente asigna a las FFAA la misión fundamental de defensa de la soberanía y la integridad territorial. No estamos pensando en suplantar a la policía. Nadie está pensando en que los militares tienen que cuidar el orden público permanentemente, aclaró. En el país, hay 42.000 militares y 44.000 policías.
Si bien los militares ya colaboran en tareas contra el narcotráfico, decomiso de armas, procesos electorales y en situaciones de emergencia por fenómenos naturales, Cordero consideró necesaria la enmienda constitucional para dotar de seguridad jurídica a las Fuerzas Armadas ante eventuales demandas.
El trámite del proyecto ya comenzó en el Congreso, al conformarse hoy la comisión que tratará ésta y otras 15 enmiendas constitucionales propuestas por el oficialismo que incluye la incorporación de la reelección indefinida del presidente y otras autoridades elegidas en las urnas. Alianza País, la coalición de gobierno, tiene la mayoría absoluta en el Parlamento.
De ser aprobados esos cambios, algo que se da por descontado, Correa quedará habilitado para presentarse a un nuevo mandato en los comicios de 2017 en caso de que decida postularse. El gobernante populista llegó al poder en 2007.