El presidente argentino, Javier Milei, se sumó a la lista de firmantes de la Declaración de Bürgenstock a favor de la paz en Ucrania, mientras que el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva fue de los pocos que no lo hizo porque, en su opinión, sólo merecen la pena unas negociaciones en las que participen las dos partes beligerantes (Ucrania y Rusia).