A eso de las 16:30 horas, el Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aterrizó en Santiago de Chile para participar de la reunión del Prosur que se llevará a cabo mañana en el Palacio de La Moneda, y en medio de los cuestionamientos por su visita.
El equipo del presidente electo de Brasil Jair Bolsonaro,, anunció como futura ministra de la Mujer, la Familia y los Derechos Humanos a la pastora evangelista Damara Alves, quien hasta ahora trabajaba como asesora en el Senado.
La evaluación es de la especialista en relaciones internacionales Andrea Ribeiro Hoffmann, profesora de la Pontificia Universidad Católica (PUC) de Río de Janeiro y para quien Bolsonaro puede “revertir” todo lo impulsado en política exterior por los gobiernos del Partido de los Trabajadores (PT), primero con Lula (2003-2010) y después con su ahijada política Dilma Rousseff (2011-2016).
A imagen y semejanza de sus lugares de culto, que se multiplican como hongos en las diversas capitales latinoamericanas, los movimientos evangélicos acrecientan su influencia en la vida política de un subcontinente tradicionalmente católico. El desarrollo de estas iglesias, opuestas al derecho al aborto, al casamiento entre homosexuales, a la legalización de la marihuana y a la “ideología de género”, se traduce en un aumento del voto conservador, según señalan expertos.
Por Michel Temer (*)
Di inicio a mi primera actividad internacional de 2018 en la reunión del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza. Me dirigí a una audiencia global, compuesta por líderes políticos, hombres y mujeres de negocios, formadores de opinión. Una vez más, hablé de la agenda de reformas que está transformando a Brasil.