Balleneros japoneses van a efectuar a partir del jueves investigaciones sobre las ballenas en el Antártico pero sin cazarlas, anunció el martes la agencia de pesca de Japón. También se informó que alegando razones en la ley de inmigración se impidió el ingreso a Japón de la organización conservacionista Sea Shepherd.
Grupos ecologistas arremetieron este viernes contra Japón, acusándole de desafiar a la opinión pública mundial después de que este país importara 2.000 toneladas de carne de ballena congelada de Islandia. El cargamento fue descargado el jueves del barco en el que había viajado desde Islandia a Osaka, declaró Junichi Sato, miembro de Greenpeace Japón.