Legisladores de la oposición brasileña expresaron este martes su desaprobación del hecho de que el Presidente Jair Bolsonaro estuviera de vacaciones por el Jubileo de Año Nuevo mientras el estado de Bahía aún intenta recuperarse de las consecuencias letales de tormentas sin precedentes que han dejado unas 20 personas muertas tras nuevos decesos luego del fin de semana y miles permanecieran evacuadas de sus hogares.
Al menos 18 personas murieron y más de 11.000 fueron evacuadas después de que lluvias cinco veces superiores al promedio histórico para la época dejaron a varios municipios en el estado de Bahía, en el norte de Brasil, literalmente bajo el barro y el agua, sin Navidad que celebrar.
Unas 30 ciudades del estado brasileño de Bahía atraviesan una situación de emergencia tras una fuerte tormenta que afectó a unas 70.000 personas y dejó a varios miles sin hogar, según los equipos de rescate.
Los años dorados en los que el Partido de los Trabajadores del Brasil era un referente internacional para la izquierda de toda América Latina parecen ahora soterrados bajo la victoria de Jair Bolsonaro.
Uno de los diputados más votados en las elecciones legislativas del pasado domingo en Brasil fue Isidorio Manoel Santana Junior, un pastor evangélico, sargento de la Policía Militarizada y quien se presenta como “ex-homosexual”, que ya tiene una larga carrera política en el estado de Bahía.