Una mujer de El Salvador ha sido condenada a 50 años de cárcel por haber abortado, según se informó este lunes. Es la primera vez que se aplica la pena máxima. Grupos pro-aborto se han comprometido a apelar la sentencia.
La emblemática sentencia del Tribunal Supremo de EE.UU. de 1973, conocida como Roe versus Wade, que abrió el camino a la despenalización del aborto, ha sido revocada este viernes al decidir sobre una ley de Misisipi que prohibía la interrupción del embarazo después de 15 semanas de gestación, acabando así con las supuestas protecciones constitucionales que habían estado vigentes durante casi medio siglo.
Una comisión de la Convención Constituyente de Chile aprobó el miércoles un conjunto de artículos que otorgan derechos sexuales y reproductivos, lo que ahora se someterá a la aprobación del pleno para ser agregados a la nueva Ley Fundamental del país.
La Corte Constitucional de Colombia falló este lunes a favor de despenalizar la interrupción de los embarazos mediante procedimientos médicos hasta la semana 24 de gestación. En otras palabras, no habrá consecuencias penales por tales acciones hasta el sexto mes.
El silencio de la Corte Suprema de los Estados Unidos después tras las apelaciones determinó que la entrada en vigencia de la legislación aprobada en mayo por el estado de Texas que prohíbe la mayoría de los abortos a partir del 1 de septiembre.
El gobernador republicano de Texas, Greg Abbot, promulgó el miércoles una nueva ley que penaliza las interrupciones de embarazos de seis semanas o más.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fustigó a su par argentino Alberto Fernández por su postura a favor de impulsar una ley para despenalizar el aborto, y afirmó que en la Argentina regresó el zurdaje, y, además, insultó a sus propios seguidores que lo cuestionan por haberse aliado a la llamada vieja política en el Parlamento.
Brasil restringió el viernes los mecanismos que tenían las mujeres violadas para poder interrumpir el embarazo no deseado, al emitir una resolución por la cual los médicos deben notificar el aborto a la Policía y ofrecer a las víctimas la opción de realizarse una ecografía para ver al feto o al embrión.
A imagen y semejanza de sus lugares de culto, que se multiplican como hongos en las diversas capitales latinoamericanas, los movimientos evangélicos acrecientan su influencia en la vida política de un subcontinente tradicionalmente católico. El desarrollo de estas iglesias, opuestas al derecho al aborto, al casamiento entre homosexuales, a la legalización de la marihuana y a la “ideología de género”, se traduce en un aumento del voto conservador, según señalan expertos.
El presidente Donald Trump afirmó ante personalidades evangélicas que los demócratas van a proceder “rápido y de manera violenta” a realizar cambios si los republicanos pierden el control del Congreso en las elecciones de noviembre.