MercoPress. South Atlantic News Agency
El estado de Texas penaliza todo aborto después de la sexta semana de embarazo
“Millones de niños pierden su derecho a vivir cada año debido al aborto”, dijo el gobernador Abbot. El gobernador republicano de Texas, Greg Abbot, promulgó el miércoles una nueva ley que penaliza las interrupciones de embarazos de seis semanas o más.
Con esta medida, Texas se suma a Ohio y Tennessee, que prohíben el aborto cuando se pueden sentir los latidos del corazón fetal, que suele ser a las seis semanas de embarazo, y no permiten excepciones ni siquiera en casos de violación o incesto.
Los movimientos pro-aborto afirman que esta es una postura particularmente restrictiva, ya que durante las primeras seis semanas muchas mujeres ni siquiera se dan cuenta de que están embarazadas.
“Nuestro creador nos otorgó el derecho a la vida y, sin embargo, millones de niños pierden su derecho a vivir cada año debido al aborto”, dijo Abbot al firmar los documentos.
Con vigencia a partir de septiembre, la nueva ley llega en un momento en que la Corte Suprema tiene entre manos el primer caso podría revertir el histórico fallo Roe v. Wade de 1973. El máximo tribunal, compuesta por una mayoría de jueces conservadores (6 a 3), deberá evaluar la constitucionalidad de la ley de Mississippi que prohíbe prácticamente todos los abortos después de la semana 15.
Actualmente, el aborto es ilegal en Texas después de las 20 semanas, excepto cuando existe un peligro para la madre o si el feto tiene anomalías graves. Según las autoridades sanitarias federales, el 90% de los abortos en los Estados Unidos ocurren durante las primeras 13 semanas de embarazo.
