Groenlandia experimentó un ritmo de deshielo 17 veces superior al promedio el mes pasado debido a temperaturas récord, mientras que en Islandia se registraron temperaturas superiores a los 26 °C, según informó esta semana el Observatorio Europeo Copérnicus.
Mayo de 2025 fue el segundo mayo más cálido registrado, con una temperatura media global del aire en superficie de 15,79 °C, 0,53 °C por encima del promedio de 1991-2020 y 1,4 °C por encima de los niveles preindustriales (1850-1900). Esto marcó que 21 de los últimos 22 meses superaron el umbral de 1,5 °C del Acuerdo de París.
Las temperaturas superficiales del mar a nivel mundial también fueron anormalmente altas, especialmente en el Atlántico Nororiental y el Mediterráneo, lo que contribuyó a olas de calor marinas.
Estas condiciones amenazan los ecosistemas, la migración de especies y la distribución de nutrientes en los océanos, mientras que el aumento de la temperatura de las aguas aumenta la intensidad de los huracanes y las tormentas.
Regiones como América del Norte, África, Asia Central, el sur de Australia y América del Sur fueron afectadas por sequías, con fuertes impactos notables en el Reino Unido, Dinamarca y los Países Bajos.
El Servicio de Monitoreo del Cambio Climático de Copernicus también señaló que mayo registró temperaturas más altas en todo el planeta, con cifras superiores a la media en muchas regiones desde hace más de dos años.
Mayo de 2025 rompe una secuencia sin precedentes de meses con temperaturas superiores a 1,5 °C por encima del nivel preindustrial. Si bien esto ofrece un breve respiro para el planeta, prevemos que el límite de 1,5 °C se supere de nuevo en un futuro próximo debido al continuo calentamiento del sistema climático, declaró Carlo Buontempo, del Observatorio Copernicus.
Mientras tanto, los océanos registraron el segundo mes más cálido de la historia reciente, tras el mismo período anterior. Amplias zonas del noreste del Atlántico Norte experimentan olas de calor marinas, con temperaturas superficiales récord durante ese mes. La mayor parte del mar Mediterráneo fue mucho más cálida que el promedio, señaló también el Observatorio.
Los océanos, que cubren el 70 % de la superficie terrestre, también actúan como un importante regulador del clima terrestre. Las aguas más cálidas dan lugar a huracanes y tormentas más violentos, con la consiguiente destrucción e inundaciones, advirtió la organización.