La selección boliviana de fútbol sufrió un retraso de más de 12 horas en Venezuela este fin de semana tras perder 2-0 ante el equipo local en un partido clasificatorio al Mundial de 2026 en Maturín. Las autoridades locales denegaron el permiso para el vuelo chárter del equipo a Santa Cruz, Bolivia, lo que obligó a los jugadores a regresar a su hotel.
El entrenador Óscar Villegas y funcionarios de la federación boliviana acusaron a Venezuela de obstrucción intencional, citando un incidente similar con la selección peruana, y sugirieron que se trataba de una táctica para obstaculizar la preparación del equipo para el partido contra Chile. La Federación Boliviana de Fútbol planea presentar una queja ante la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), denunciando la retención ilegal como una injerencia política en el deporte.
Villegas insistió en que su equipo contaba con toda la documentación y los permisos necesarios para evitar retrasos, como temían. Ya lo sabíamos. Le pedimos al Ministro de Gobierno que dialogara con el gobierno venezolano para que nos permitiera salir. También hablamos con el cónsul venezolano aquí hace una semana, alertándole de que esto sucedería, explicó.
Recordó que una situación similar ocurrió en marzo pasado con la delegación peruana, que tuvo que pasar ocho horas en el aeropuerto para salir de Venezuela en la aerolínea de bandera local, Conviasa. Elegimos otra, pero ven que no respetan ni siquiera a otra aerolínea extranjera, se quejó Villegas. No es una sorpresa para nosotros, pero estas cosas no llevan a nada bueno, argumentó.
Las autoridades del fútbol boliviano insistieron en que el retraso le costó al equipo un día completo de trabajo, dejando solo el domingo y el lunes para entrenar antes de enfrentar a Chile el martes.