A pesar de las manifestaciones en su contra celebradas el miércoles en todo el país, el presidente argentino, Javier Milei, vetó el proyecto de ley sobre financiación de las universidades públicas aprobado por el Congreso el mes pasado por considerar que dificultaría seriamente la sostenibilidad de las finanzas públicas. Tras conocerse la medida, los legisladores de la oposición se comprometieron a reunirse la próxima semana para tratar de revertirla a través de los mecanismos parlamentarios.
El proyecto de ley aprobado el 13 de septiembre preveía la actualización de las asignaciones operativas y los salarios de acuerdo con la persistente inflación del país, que en agosto se situó en un 236,7% interanual.
El proyecto de ley en análisis no pretende defender ni garantizar la protección y el sostenimiento del financiamiento de las Universidades Nacionales, sino que busca perjudicar políticamente al gobierno, razonó Milei. El financiamiento debe ser discutido al momento de sancionar el Presupuesto Nacional para el ejercicio correspondiente, prosiguió.
De haberse aplicado, la nueva ley representaría un impacto presupuestario equivalente al 0,14% del PIB. De ahí que quienes se oponen al veto de Milei argumentaran que no tendría un impacto significativo en las arcas del país. Sin embargo, el economista Milei consideró que una iniciativa de este tipo dificultaría seriamente la sostenibilidad de las finanzas públicas porque obligaría al Ejecutivo a encontrar financiación imprevista, poniendo así en peligro la política de déficit cero de Milei. El mes pasado, el mandatario también vetó un aumento para jubilados por las mismas razones.
Asimismo, el decreto de Milei señaló que la norma impugnada establecería un privilegio para el personal de las Universidades Nacionales frente al resto de los trabajadores de la Administración Pública Nacional, cuyos aumentos salariales deben resolverse a través de la negociación colectiva.
De acuerdo con la Constitución argentina, el Congreso puede revertir un veto presidencial siempre que obtenga un respaldo de dos tercios en cada Cámara en una nueva ronda de votaciones. El partido gobernante de Milei, La Libertad Avanza (LLA), carece de dicha mayoría y necesitaría alianzas para sobrevivir al embate de la oposición, que ya cuenta con el apoyo de la Unión Cívica Radical (UCR), Encuentro Federal, Coalición Cívica, Unión por la Patria (UP) y los partidos de izquierda.
En el caso de las jubilaciones, estos bloques no pudieron superar la alianza de LLA con el PRO del ex presidente Mauricio Macri y otras fuerzas políticas menores, además de 5 legisladores de la UCR. Para evitar un bis, en la protesta del miércoles en Buenos Aires participaron la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner (CFK), el ex candidato presidencial Sergio Massa y el ex jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, quien confirmó su escisión de las filas del PRO.
Los bloques opositores enviaron este jueves un pedido al presidente de la Cámara baja, Martín Menem, para que convoque el próximo miércoles a tratar este tema.