El Gobierno chavista de Venezuela sostuvo este martes que la incautación en República Dominicana por parte de autoridades estadounidenses de una aeronave utilizada por el presidente Nicolás Maduro constituye un acto criminal de piratería.
La República Bolivariana de Venezuela denuncia ante la comunidad internacional que, una vez más, las autoridades de los Estados Unidos de América, en una reiterada práctica delictiva que no puede calificarse de otra cosa que de piratería, han confiscado ilegalmente una aeronave que ha sido utilizada por el Presidente de la República, justificándose en las medidas coercitivas que unilateral e ilegalmente impone en todo el mundo, dijo el canciller Yván Gil en un comunicado.
Estados Unidos ya ha demostrado que utiliza su poder económico y militar para intimidar y presionar a Estados como República Dominicana para que sirvan de cómplices en sus actos criminales. Este es un ejemplo del llamado 'orden basado en reglas', que, desconociendo el derecho internacional, busca establecer la ley del más fuerte, para crear normas que se ajusten a sus intereses, prosiguió.
La compra del trimotor Dassault Falcon 900EX que voló este lunes al estado norteamericano de Florida violó las sanciones de EE.UU. contra Caracas, se determinó al ordenar su captura. El Departamento de Justicia incautó una aeronave que, según alegamos, fue comprada ilegalmente por 13 millones de dólares a través de una empresa fantasma y sacada de contrabando de Estados Unidos para ser utilizada por Nicolás Maduro y sus compinches, dijo el fiscal general estadounidense, Merrick Garland.
La aeronave fue adquirida a una empresa de Florida y exportada ilegalmente en abril de 2023 a Caracas para viajes internacionales de Maduro casi exclusivamente hacia y desde una base militar en Venezuela, según el Departamento de Justicia estadounidense.
Nuestra oficina, junto con nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley, continuará trabajando para incautar esta aeronave y todos los demás activos en violación de la ley estadounidense, señaló el fiscal federal del Distrito Sur de Florida, Markenzy Lapointe.
El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, dijo a la prensa que la aeronave no estaba registrada a nombre del Gobierno venezolano, sino de un particular, mientras que el canciller Roberto Álvarez explicó que la aeronave se encontraba en territorio dominicano para mantenimiento y que el pasado 22 de mayo el Ministerio Público obtuvo una orden judicial emitida por un Juzgado Nacional para inmovilizarla a petición de EEUU para registrarla en busca de evidencias y objetos relacionados con actividades de fraude, contrabando de mercancías para actividades ilícitas y lavado de activos.
Incautar el avión de un jefe de Estado extranjero es algo inaudito en materia penal, dijo una fuente anónima del Gobierno estadounidense citada por la CNN. Estamos enviando aquí un mensaje claro de que nadie está por encima de la ley, nadie está por encima del alcance de las sanciones estadounidenses.
El Dassault Falcon 900EX tiene capacidad para 16 personas y vuela a una velocidad de crucero de 892 km/h con una autonomía de 8.334 kilómetros.