Dos dirigentes clave de organizaciones terroristas técnicamente en guerra con Israel fueron abatidos este martes con proyectiles que impactaron en los lugares donde se encontraban. Ismail Haniyeh, de Hamás, se hallaba en Teherán, donde horas antes había asistido a la toma de posesión presidencial de Masoud Pezeshkian, mientras que Fuad Shukr (alias Hajj Mohsin o Muhsin Shukr), asesor principal de Hezbolá, dependía del líder Hassan Nasrallah, y era buscado por Estados Unidos por su participación en el atentado de 1983 contra un cuartel de marines en la capital libanesa.
Hermano dirigente, el combatiente mártir Ismail Haniyeh, líder del movimiento, murió a consecuencia de una incursión traicionera sionista en su residencia de Teherán, tras participar en la ceremonia de investidura del nuevo presidente iraní, confirmó el grupo pro palestino Hamás en un comunicado. Haniyeh, afincado en Qatar, era el número uno del buró político de Hamás. Es una yihad de victoria o de martirio, añadió el comunicado.
Mientras tanto, las autoridades israelíes confirmaron la muerte del comandante militar de más alto rango de Hezbolá y estrecho asesor del líder Hassan Nasrallah. Israel consideraba a Shukr responsable de la muerte de miles de civiles israelíes a lo largo de los años y, en particular, de los 12 niños caídos el pasado sábado en un ataque con cohetes contra la localidad drusa de Majdal Shams, en los Altos del Golán ocupados por Israel.
Haniyeh fue el líder de Hamás en la Franja de Gaza desde 2006 hasta febrero de 2017, cuando fue sustituido por Yahya Sinwar, considerado el cerebro de los atentados del 7 de octubre y el verdadero poder del grupo con la última palabra en las recientes negociaciones para una tregua. El 6 de mayo de 2017, Haniyeh fue elegido presidente del Buró Político de Hamás.
En cuanto al ataque en Beirut, los medios locales informaron de una explosión en la zona de Haret Hreik, aunque no estuvo claro si se trataba de aviones o drones. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que habían abatido al responsable del atentado del sábado y de la muerte de otros numerosos civiles israelíes.
Según el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, Hezbolá había cruzado la línea roja con su ataque de Majdal Shams, en el que murieron 12 niños y adolescentes drusos israelíes al impactar un cohete en un campo de fútbol. Hezbolá negó toda implicación y afirmó que respondería a cualquier ataque israelí. Más de 200.000 residentes a ambos lados de la frontera entre Israel y el Líbano han sido evacuados en los últimos meses por el intercambio de ataques con cohetería.
Shukr, por cuya cabeza se ofrecían 5 millones de dólares según la Oficina de Recompensas de Estados Unidos, llevaba 30 años en Hezbolá. Desempeñó un papel fundamental en el atentado del 23 de octubre de 1983 contra el cuartel de la Infantería de Marina estadounidense en la capital libanesa, en el que murieron 241 militares y 128 resultaron heridos.
Aunque su muerte fue confirmada por las IDF, reporteros independientes en la zona no pudieron establecer si era una de las dos personas muertas en el ataque. La agencia nacional de noticias del Líbano afirmó que el objetivo del ataque era la zona en torno al Consejo de la Shura de Hezbolá, en el barrio de Haret Hreik de Beirut.