El Ministerio de Trabajo de Argentina dictó la llamada conciliación obligatoria, frustrando así la huelga anunciada para el viernes por el gremio de pilotos APLA.
En consecuencia, los vuelos de Aerolíneas Argentinas operarán como estaba previsto en el último día laborable antes de las dos semanas de vacaciones escolares de invierno y el receso judicial en la capital del país.
Además de APLA, la Asociación Argentina de Auxiliares de Vuelo también iba a llevar a cabo una medida de protesta contra la desregulación de la industria aérea llevada a cabo por el Presidente Javier Milei, que permite a los competidores extranjeros operar servicios nacionales e internacionales ilimitados.
Aerolíneas Argentinas no resuelve ni propone nada en las negociaciones laborales, provocando un conflicto a las puertas de las Vacaciones de Invierno, había advertido APLA al amenazar con llevar la huelga a la primera semana de las vacaciones, lo que afectaría a los viajes de miles de personas.
La negociación salarial seguirá en marcha, ya que los salarios en Argentina, especialmente los del sector público, están muy por debajo de la inflación.