Ciudades enteras de Ecuador se quedaron sin electricidad este miércoles hacia las 15.30, sólo dos días después de que el ministro de Energía, Roberto Luque, descartara esa posibilidad al restar importancia al cese de actividad de al menos tres centrales hidroeléctricas debido a las fuertes lluvias que causaron al menos 17 muertos. A mediados de abril, una serie de apagones provocaron la destitución la predecesora de Luque, Andrea Arrobo.
El actual ministro también explicó que los apagones se debieron a una avería en la línea de transmisión que provocó una desconexión en cascada. Por lo tanto, no hay servicio de energía en todo el país, agregó. El Operador Nacional de Electricidad (Cenace) aseguró que se están haciendo todos los esfuerzos para restablecer el servicio a la brevedad. Estamos concentrando todos nuestros esfuerzos para solucionar el problema lo más pronto posible, publicó Luque también en X.
La interrupción del suministro provocó asimismo intermitencias en la telefonía móvil, la paralización del metro de Quito y cortes de agua en varias ciudades. La Agencia Metropolitana de Tránsito de la capital dijo que más de 1.000 semáforos se habían visto afectados, lo que motivó la asignación de 500 agentes para dirigir el tráfico. El evento debe ser muy significativo para haber afectado incluso la energía en el Metro de Quito que utiliza un sistema aislado, dijo el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, citado por Teleamazonas.
Se reportó un apagón en Quito, Guayaquil, Cuenca, Ambato, Tulcán, Latacunga, Riobamba, Santo Domingo de los Tsáchilas, Manta, Portoviejo, Durán, informó también la televisora local.
El pasado lunes, la central hidroeléctrica Coca-Codo-Sinclair fue paralizada ante el peligro de que pudiera ser dañada por el aumento de la cantidad de sedimentos en los caudales de los ríos que la alimentan debido a las lluvias que dejaron al menos 17 muertos en zonas andinas, además de 29 heridos, y 5 desaparecidos en medio de graves daños a la infraestructura, según la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR). Las intensas lluvias provocaron avalanchas y daños en carreteras y otras estructuras, se explicó.
La mayoría de las muertes se produjeron tras una avalancha cerca de la ciudad turística de Baños de Agua Santa el pasado domingo, en la provincia andina de Tungurahua. Sólo en ese incidente murieron 13 personas y 25 resultaron heridas. Además, 3 personas murieron el fin de semana en la provincia vecina de Chimborazo, y una más en Cotopaxi, ambas en la zona andina central. El material rocoso y el lodo continúan descendiendo, por lo que no es posible realizar labores de limpieza o rescate en la zona de Chimborazo, indicó la SNGR.
El organismo también registró 41 viviendas afectadas, 11 destruidas, 32,79 kilómetros de carreteras dañadas, 3 puentes colapsados y otros 7 dañados, además de otros bienes públicos impactados, entre ellos un centro asistencial. Un total de 1.395 personas se han visto afectadas por 79 fenómenos peligrosos desde el pasado viernes en 36 cantones (municipios) y 60 parroquias de 13 de las 24 provincias del país. Los fenómenos naturales más recurrentes fueron los corrimientos de tierras, que representaron el 39,2% de las emergencias, seguidos de inundaciones (21,5%).
Como medida de precaución, el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) suspendió este lunes el transporte de unos 200.000 barriles diarios desde los campos de la región amazónica hasta un puerto en el Pacífico.