El ministro de Defensa argentino, Luis Petri, y el danés Troels Lund Poulsen firmaron este martes en Buenos Aires una carta de intención por la que el país sudamericano adquirirá 24 cazas supersónicos Lockheed Martin F-16 de segunda mano por unos 300 millones de dólares. El embajador estadounidense Marc Stanley también estuvo presente en la ceremonia como muestra del beneplácito de Washington a la operación
Recibimos la visita del Ministro de Defensa danés, Troels Lund Poulsen, con quien firmamos una carta de intención para la adquisición de los aviones F-16 y equipos de apoyo. Estamos sentando las bases para la cooperación en el área de defensa entre Dinamarca, EE.UU. y Argentina, escribió Petri en X.
El contrato definitivo se firmará el mes próximo en Copenhague, cuando Petri viaje al país europeo. El ministro de Economía, Luis Toto Caputo, también habría dado luz verde al gasto, según medios de Buenos Aires. Parte de la financiación será aportada por EE.UU. que, como ya adelantó Clarín, también proveerá el sistema de armas, dijo Clarín.
La defensa danesa está inmersa en un proceso de cambio generacional, en el que nuestros aviones F-16 están siendo retirados en favor de los nuevos cazas F-35″, dijo Lund Poulsen en un comunicado.
Dinamarca va a donar 19 F-16 a Ucrania, y el Gobierno danés ha decidido vender 24 cazas F-16 daneses a Argentina. Por lo tanto, estoy muy satisfecho de que hayamos firmado hoy una declaración conjunta de intenciones para completar la venta”, añadió.
La transacción de estos aviones para la Fuerza Aérea argentina pone fin a todas las conversaciones previas con India, y en particular con China, cuyo modelo JF-17 también era una opción probable.
Las negociaciones fueron llevadas a cabo por el actual Jefe del Estado Mayor Conjunto, Xavier Isaac, que dirigió la Fuerza Aérea durante el mandato del ex presidente Alberto Fernández.
Con esta elección por parte de la administración libertaria del Presidente Javier Milei, las fuerzas y sistemas militares de Argentina estarán técnicamente en línea con los de Estados Unidos. Si Argentina hubiera optado por los JF-17, Buenos Aires habría perdido acuerdos de cooperación en materia de seguridad y defensa con Washington.
Según Clarín, el contrato con Dinamarca y Estados Unidos fue discutido por Petri el lunes pasado con la embajadora británica, Kirsty Hayes, dado el embargo militar del Reino Unido a Argentina tras la guerra del Atlántico Sur de 1982. Se dice que los F-16 no tienen componentes fabricados en el Reino Unido. Además de los aviones, la venta incluye motores, piezas de repuesto, simuladores y equipos de entrenamiento.
En 2017, Argentina retiró el último Dassault Mirage de fabricación francesa tras cuatro décadas de servicio.