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Exjefe militar admite que Bolsonaro se le acercó para dar un golpe de Estado

Sábado, 16 de marzo de 2024 - 09:50 UTC
Bolsonaro ha negado intentar un golpe de Estado en los días posteriores a su derrota electoral. El testimonio de Freire indicaría lo contrario Bolsonaro ha negado intentar un golpe de Estado en los días posteriores a su derrota electoral. El testimonio de Freire indicaría lo contrario

El exjefe del Ejército brasileño Marco Antonio Freire Gomes admitió este viernes ante investigadores de la Policía Federal que fue abordado por el entonces presidente Jair Bolsonaro para explorar la posibilidad de anular el resultado de las elecciones de 2022 mediante acciones militares.

La declaración de Freire coincidió con la de otros oficiales de alto rango que dijeron que Bolsonaro barajó abiertamente la idea de un golpe de Estado tras ser derrotado por Luiz Inácio Lula da Silva en la segunda vuelta.

Según el testimonio de Freire, Bolsonaro se reunió el 7 de diciembre de 2022 y en otras dos ocasiones con la cúpula militar en el Palacio de la Alvorada para buscar diferentes mecanismos legales con el fin de mantenerse en el poder tras el traspaso previsto para el 1 de enero de 2023.

El 8 de enero de 2023, decenas de bolsonaristas asaltaron los emblemáticos edificios del Palacio de Planalto, el Congreso y el Supremo Tribunal Federal (STF) en Brasilia con el objetivo de animar a los militares a derrocar a Lula.

Según medios brasileños que citan el testimonio de Freire Gomes filtrado a la prensa, Bolsonaro planeaba tomar el Tribunal Superior Electoral (TSE) para “aclarar la conformidad y legalidad del proceso electoral”, además de imponer el estado de sitio mediante un decreto similar al borrador encontrado en enero de 2023 en el domicilio del ex ministro de Justicia de Bolsonaro, Anderson Torres.

Freire también afirmó que él y el ex Jefe de la Fuerza Aérea Carlos de Almeida Baptista Junior se opusieron “de forma contundente” al planteo de Bolsonaro y aseguró que “no había ningún sustento legal para tomar cualquier actitud”. El Jefe de la Fuerza Aérea incluso advirtió a Bolsonaro que lo arrestaría en caso de que intentara llevar a cabo sus planes golpistas. Por otro lado, el jefe de la Marina, almirante Garnier Santos, sí apoyó el levantamiento.

Ante estos testimonios, el juez del Supremo Tribunal Federal (STF) Alexandre De Moraes levantó el secreto de las declaraciones de los investigados por el Ministerio Público Federal, entre ellos Bolsonaro y la cúpula militar.

Esta semana, el STF condenó a otras 15 personas a penas de entre 14 y 17 años de prisión por los hechos del 8 de enero, con lo que el número total de condenados asciende a 131, pese a los argumentos de la defensa de que sus clientes pretendían participar en una manifestación pacífica y nunca estuvieron en condiciones de dar un golpe de Estado.

A pesar de las crecientes pruebas de lo contrario, Bolsonaro ha negado haber intentado un golpe de Estado en los días posteriores a su derrota electoral. Incluso se marchó a Estados Unidos para evitar entregar la banda presidencial a Lula.

Además de los dos comandantes militares, la policía tiene declaraciones de otros tres testigos que implican directamente a Bolsonaro como el principal conspirador detrás del intento de golpe, dijo una fuente policial a Reuters.

Categorías: Política, Brasil.