La teniente segunda de la Fuerza Aérea estadounidense Madison Marsh, que pilota cazas F-16, ha sido nombrada esta semana Miss América 2024 en un resultado sin precedentes para el tradicional concurso de belleza que se celebra desde 1920 y cuenta con una representante de cada estado.
Miss Colorado se ha convertido en la primera militar estadounidense en ganar el certamen. Ellie Breaux, Miss Texas, quedó primera princesa.
Marsh fue destinada recientemente a pilotar cazas Lockheed Martin F-16 Fighting Falcon (Viper) tras graduarse el año pasado en la Academia de la Fuerza Aérea. También es conocida por su activismo en la Fundación Whitney Marsh para concienciar y prevenir el cáncer, especialmente el de páncreas, que mató a su madre cuando Madison tenía 17 años. Empezó a volar a los 15 y realizó su primer vuelo en solitario a los 16, aún como civil.
Marsh, de 22 años, también cursa un máster en el programa de política pública de la Harvard Kennedy School. Ganó el título de Miss Colorado el año pasado antes de graduarse en la academia militar.
Madison, la ciudad te desea mucho éxito, publicó en X el alcalde de Colorado Springs, Yemi Mobolade. Has inspirado a innumerables chicas a soñar en grande y alcanzar las estrellas.
Marsh, nacida en Arkansas, superó las competiciones preliminares hasta que el grupo se redujo a sólo 11 concursantes, que se enfrentaron en cuatro categorías, incluida una ronda de debate y una presentación en traje de noche. Durante la ronda de debate, Marsh mencionó a su madre, que murió de cáncer de páncreas en 2018, lo que la motivó a crear la Fundación Whitney Marsh para recaudar fondos para la investigación del cáncer. Cuando se le preguntó por su carrera militar, dijo que encarnaba su forma de hacer las cosas: con pasión.
Es una experiencia increíble unir las dos partes favoritas de mi vida y, con suerte, marcar la diferencia para que otros puedan darse cuenta de que no tienes que limitarte, también se citó a Marsh.
El caso de Madison se asemeja al de María del Carmen Sabaliuskas, la argentina hija de una limpiadora de casas italiana y un ferroviario lituano que se abrió camino desde un pequeño pueblo de la provincia de Córdoba hasta convertirse en piloto de Aerolíneas Argentinas tras ganar el concurso de Miss Argentina en 1967, lo que la llevó a una carrera como modelo.