El suicidio del futbolista de 29 años Diego Galo, del club de Primera División Amateur Sportivo Bella Italia, provocó pedidos de asistencia en salud mental para los jugadores de todo el país, tras una serie de hechos similares ocurridos en los últimos años, se informó en Montevideo.
Galo había escrito una carta en su estado de WhatsApp mencionando su depresión el viernes pasado. Su cuerpo fue encontrado en una playa de la zona de Kibón gracias a las cámaras de videovigilancia, según confirmaron este lunes las autoridades del Ministerio del Interior.
Sus compañeros del Sportivo Bella Italia lo describieron como un defensa valiente y una gran persona y pidieron a las autoridades nacionales y a los gremios del fútbol que tomen medidas urgentes en materia de salud mental. Que no se quede sólo en palabras y discursos, escribieron en redes sociales.
Pese a su menor notoriedad, el caso de Galo se suma a una serie de sucesos similares ocurridos en los últimos años con las muertes de Santiago Morro García, Maximiliano Castro, Emiliano Cabrera, Williams Martínez y Waldemar Victorino, quien se quitó la vida con un arma de fuego en agosto de este año, a los 71 años. Había disputado 33 partidos con la Celeste, marcando 15 goles. Había ganado la Copa Libertadores con Nacional de Montevideo, entre otros logros de su carrera. Después de sus días de gloria, se dijo que había quedado sin empleo y pasaba apuros económicos.
Maximiliano Castro, que había jugado profesionalmente hasta 2008, fue hallado muerto en agosto de 2021 a la edad de 46 años. La causa de la muerte fue declarada suicidio. Se convirtió en su momento en el tercer ex jugador uruguayo fallecido en circunstancias similares en dos semanas y el cuarto ese año. El mes anterior, el defensa Williams Martínez, de 38 años, del Villa Teresa de Segunda División, se quitó la vida días después de quedar apartado del juego activo tras enfermar de Covid-19 en junio. Martínez había jugado en el West Bromwich Albion inglés y en el Reims francés.
Menos de una semana después de la muerte de Martínez, Emiliano Cabrera, de 27 años, se suicidó. Jugaba al fútbol profesional en las ligas menores de Uruguay. Y en febrero de ese mismo año, Santiago Morro García, que jugaba en el Godoy Cruz de Mendoza de la primera división argentina, también se quitó la vida mientras se negociaba la renovación de su contrato. Martínez y García habían sido compañeros de equipo en 2014, en el River Plate uruguayo.
Según las autoridades sanitarias uruguayas, el 80,92% de las personas que se suicidan son hombres, pero las mujeres representan la mayoría de los intentos de suicidio.