El presidente de China, Xi Jinping, anunció este lunes que no asistirá a la Cumbre del G20 que se celebrará los días 9 y 10 de septiembre en Nueva Delhi y que su país estará representado por el primer ministro, Li Qiang. Xi ha asistido a todas las cumbres del G20 desde que llegó al poder, excepto a la de Roma en 2021, en la que participó por videoconferencia.
También estará ausente de la reunión el presidente ruso, Vladímir Putin, sobre quien pesa una orden de detención de Interpol emitida por la Corte Internacional de Justicia por presuntos crímenes en la invasión de Ucrania.
Al asistir a esta reunión, el primer ministro Li Qiang transmitirá los pensamientos y posiciones de China sobre la cooperación en el G20, presionando para que el G20 fortalezca la unidad y la cooperación, y trabajando juntos para combatir los desafíos económicos y de desarrollo globales, dijo la portavoz del Gobierno chino, Mao Ning.
El G20 es un importante foro para la cooperación económica internacional. China siempre ha concedido gran importancia a las actividades relevantes y ha participado activamente en ellas, prosiguió.
El primer ministro Li Qiang expondrá los puntos de vista y las propuestas de China sobre la cooperación en el G20, promoverá que el G20 refuerce la solidaridad y la cooperación, y trabajará conjuntamente para abordar los desafíos económicos y de desarrollo globales, añadió.
El G20 reúne a los 19 países más importantes del mundo desde el punto de vista económico, además de la Unión Europea, que juntos representarían alrededor del 85% del PIB mundial y dos tercios de la población.
China, segunda economía mundial, se ha fijado un objetivo de crecimiento anual en torno al 5%, pero tiene sus propios problemas, como la débil demanda de los consumidores, el creciente desempleo juvenil y una crisis en el crucial sector inmobiliario.
La ausencia de Xi contrasta con su gran acogida en la Cumbre de los BRICS celebrada hace unos días en Johannesburgo, en la que se admitió a nuevos miembros (Argentina, Etiopía, Irán, Arabia Saudí, Egipto y Emiratos Árabes Unidos) en el bloque de países emergentes formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
China lleva tiempo haciendo campaña para ampliar y fortalecer los BRICS como contrapeso al dominio estadounidense y occidental de los asuntos mundiales.
Pekín también mantiene desde hace tiempo una disputa fronteriza con India, país anfitrión del G20, y en los últimos años se han producido enfrentamientos mortales a lo largo de la frontera. Hace tres años, las tensiones desembocaron en un enfrentamiento en la región de Ladakh en el que murieron 20 soldados indios y cuatro chinos. Se convirtió en un largo enfrentamiento en la escarpada zona montañosa, donde cada parte ha estacionado decenas de miles de efectivos militares respaldados por artillería, tanques y aviones de combate. También han surgido fricciones en torno al comercio y a los crecientes lazos estratégicos de India con el principal rival de China, Estados Unidos. Recientemente, India ha superado a China como nación más poblada del mundo, y ambas rivalizan en tecnología, exploración espacial y comercio mundial. India y China libraron una guerra fronteriza en 1962.