El tedeum del jueves fue el último para el presidente argentino, Alberto Fernández, pero también para el arzobispo de Buenos Aires, Mario Aurelio Poli, que se jubilará este año tras suceder al cardenal Jorge Mario Bergoglio cuando éste se convirtió en el Papa Francisco en 2013. Fernández no optará a la reelección, por lo que concluirá su mandato el 9 de diciembre.