El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, podría ser destituido de su cargo después de que la Asamblea Nacional aprobara el martes por 88 votos a favor una moción para pedir su juicio político por el presunto delito de malversación de fondos públicos, se informó en Quito.
La decisión se tomó tras una larga sesión en la que se escucharon todas las voces, a favor o en contra de la medida. La moción había sido presentada por la asambleísta Viviana Veloz, del Movimiento Unión por la Esperanza (Unes), del ex presidente Rafael Correa.
La moción proponía enjuiciar al presidente Lasso por la infracción constitucional de peculado en un contrato suscrito entre la empresa pública Flota Petrolera Ecuatoriana y la empresa privada Amazonas Tanker, para el alquiler de embarcaciones para el transporte de hidrocarburos.
El contrato se firmó en 2018 y se renovó en 2020, cuando Lasso aún no era presidente. Sin embargo, los acusadores de Lasso sostienen que tras llegar al cargo en mayo de 2021 permitió que dicho contrato siguiera vigente, lo que exige su destitución.
La decisión del pleno se produjo después de que la Comisión Legislativa de Contraloría no consiguiera los votos para aprobar un informe en el que recomendaba no destituir a Lasso.
Será la primera vez en 44 años de vida democrática en Ecuador que un presidente se enfrente a un posible juicio político ante el Poder Legislativo.
El pedido de juicio político, que fue presentado el 16 de marzo por 59 legisladores de varios partidos y movimientos de oposición al gobierno de Lasso, también fue avalado por la Corte Constitucional.
Para que el conservador Lasso sea destituido, se necesitan 92 votos (o dos tercios de los miembros del Congreso de 137 miembros).