El Presidente argentino, Alberto Fernández, insistió el lunes en que dar un techo a cada habitante es un acto de justicia. Fernández hizo estas declaraciones en la clausura de un Foro de Ministros y Máximas Autoridades de Vivienda y Urbanismo de América Latina y el Caribe en el Centro Cultural Kirchner (CCK) de Buenos Aires.
El mandatario dijo también que la vivienda es un derecho humano que no debe pensarse como una mercancía. No es aceptable sostenerla como un bien al que algunos tienen acceso y otros no, dijo Fernández, quien también se pronunció en contra de naturalizar la falta de vivienda.
También explicó que en Argentina hay 140 mil viviendas en construcción, que se suman a las 100 mil que se construyeron durante su gestión. Tenemos que seguir luchando por un mundo mejor y por la igualdad que se necesita en todo el mundo, en una situación crítica que afecta a todos, dijo Fernández.
Me pareció una idea formidable para abordar un tema muy importante para la región, vivimos en el continente más desigual del mundo. El acceso a la vivienda es un derecho humano y debe abordarse como tal. El hecho de que podamos empezar el año proyectando un plan conjunto para abordar el problema de la falta de vivienda me parece un gran avance, señaló también el presidente argentino.
Nadie discutiría que tenemos que preservar los derechos humanos, sin embargo, discutimos si el Estado tiene que proveer el derecho a la vivienda, se cuestionó.
En cuanto a la crisis climática global, Fernández consideró que las potencias mundiales deberían ayudar a sostener la cuestión ambiental en aquellos países que no son los causantes de la crisis y que son considerados países de renta media.
Siempre acabamos atrapados en el limbo porque no somos ni poderosos ni pobres y nos quitan muchos derechos. Lo que nadie tiene en cuenta es que los países de renta media representan el 60% de la pobreza mundial, concluyó eljefe de estado.