El embajador de Uruguay en Buenos Aires, Carlos Enciso, dijo en una entrevista radial que un cambio político en el gobierno de su país ahuyentaría a los potenciales inversores argentinos tras las políticas favorables en los últimos años del presidente Luis Lacalle Pou.
Nos dicen 'nos gusta mucho su presidente', dijo Enciso a Diamante FM. Agregó que un cambio en la orientación política del gobierno en Uruguay podría hacer que los empresarios argentinos decidan invertir en otro lugar.
Según Enciso, quien ante Argentina es representante del Estado y no de un partido político, los empresarios de ese país le comentaron su afinidad por el actual gobierno uruguayo.
Nos dicen 'nos gusta mucho su presidente y su gobierno', aunque también señalan que los anteriores tampoco eran malos, siempre y cuando hubiera certezas. En general, la actitud de este gobierno es más amplia y abierta, obviamente en muchos ámbitos esto gusta más y cae mejor, dijo Enciso.
No dudo de que, si cambia el signo [político], ojalá que no, habrá gente que se replantearía las cosas. Los que están no se irán automáticamente por un cambio de Gobierno, pero los que no están y pueden venir tendrán otros oídos y pueden tener otras objeciones, explicó.
Hay una cuestión clara que se complicó y puso en duda a nuestro país, y es que la ocupación [de centros de trabajo durante las huelgas] se calificó como una ampliación del derecho de huelga. Algunas empresas se fueron. No es el equilibrio normal entre el trabajador y el capital, argumentó Enciso. Ahora esto se ha equilibrado y es firme. Hay empresas argentinas que dicen que ahora quieren invertir en Uruguay.
Enciso insistió en que los empresarios argentinos están contentos con la actual administración uruguaya, y que muchos decidieron invertir tras la Ley de Consideración Urgente (LUC) auspiciada por el gobierno de Lacalle Pou.
Cuando la ocupación de centros de trabajo se consideró una ampliación del derecho de huelga, muchos inversores se retiraron de Uruguay. ”Yo era intendente [del departamento (provincia) de Florida] y se fueron. Eso hoy se equilibró con la LUC y hay empresas argentinas que hoy dicen ‘sí quiero’ invertir en Uruguay, señaló también Enciso.
Tras estas inadmisibles” declaraciones, los legisladores opositores uruguayos del Frente Amplio (FA) reaccionaron con dureza, porque el diplomático, a su juicio, representaba a un país y no a un partido político concreto.
Parece que en este gobierno hay embajadores que tienen corona. Los diplomáticos no pueden realizar actividades ni declaraciones político-partidistas. Incluso para hacer declaraciones propias de su función necesitan autorización expresa, publicó en Twitter el senador Daniel Caggiani.
La senadora Liliam Kechichian dijo que las declaraciones de Enciso fueron una violación de sus deberes como embajador.
Esperamos que la Cancillería tome cartas en el asunto, el senador Mario Bergara.
También se recordó que, bajo los gobiernos del FA, la inversión extranjera creció en Uruguay como no lo había hecho en los 20 años anteriores.