El presidente argentino, Alberto Fernández, que fue uno de los pocos mandatarios sudamericanos que visitó a Luiz Inácio Lula Da Silva durante su encarcelamiento de 580 días por su presunta implicación en el escándalo Lava Jato, felicitó el domingo al militante del Partido de los Trabajadores por su regreso al Palacio de Planalto y anunció que ambos jefes de Estado mantendrán una reunión a solas el lunes en Brasilia.
Fernández estuvo acompañada por el canciller Santiago Cafiero y el embajador argentino Daniel Scioli.
La reunión del lunes, que tendrá lugar en el Palacio de Itamaraty, sede de la Cancillería brasileña, es también un preludio del primer viaje al exterior de Lula nuevamente como presidente, que será a Buenos Aires para la cumbre de la Celac del 24 de enero.
Mañana habrá un breve encuentro entre Lula y Alberto Fernández, anunció Cafiero el domingo.
¡Felicitaciones presidente Lula! América Latina se unió y luchó. El sueño se hizo realidad, escribió también Fernández en su cuenta de Twitter. Le deseo lo mejor para este gobierno, el futuro será de profunda hermandad. Con una mirada más justa, libre y equitativa, lograremos el verdadero desarrollo de nuestros pueblos, agregó.
La misión de Fernández llegó horas antes al Aeropuerto Internacional Presidente Juscelino Kubitschek de Brasilia. Además de Cafiero, su comitiva estaba formada por la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, y la secretaria de Cambio Climático, Cecilia Nicolini.
Con la llegada de Lula será mucho más fácil hablar de integración, dijo Fernández. Lula es un integrador, cree en la Patria Grande, cree que Brasil es parte de esa patria latinoamericana, sudamericana, señaló el mandatario argentino.
Estamos ultimando la agenda, dijo Cafiero a los periodistas. También dijo que Lula llegará a Buenos Aires el 23 de enero en visita de Estado a Argentina. Brasil es el principal socio comercial de Argentina, habiendo comprado el 14,1% de las exportaciones argentinas en los primeros 11 meses de 2022.
Este momento histórico significa el renacimiento de la relación entre Argentina y Brasil, con el impacto positivo que se reflejará en el aumento del comercio bilateral, en el acuerdo de integración financiera y energética, y a partir de la afinidad personal que Lula tiene con Alberto, argumentó Scioli.
La vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, no asistió a la toma de posesión de Lula, pero publicó en las redes sociales: Amanece un nuevo día en Sudamérica, ¡Fuerza Lula! Fuerza Brasil!