Abuelas de Plaza de Mayo anunció el miércoles que el 132º nieto arrebatado a su familia de sangre durante la dictadura militar argentina (1976-1983) había sido encontrado sólo 6 días después del hallazgo del nieto nº 131.
Con este logro, 2022 termina con la resolución de un nuevo caso que renueva las esperanzas de este camino de verdad, memoria, justicia e identidad. Esperamos que el 2023 nos reciba con muchos más encuentros, expresó la organización en un comunicado.
La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, explicó durante una conferencia de prensa en Buenos Aires que el nombre del Nieto Nº 132 era Juan, y que era hijo de Mercedes del Valle Morales, secuestrada en 1976 en Tucumán.
Juan, que participó en la conferencia a través de una conexión de vídeo, admitió que aún no se ha determinado la identidad biológica de su padre.
Nacida el 20 de agosto de 1954, Mercedes fue secuestrada el 20 de mayo de 1976 en la ciudad tucumana de Monteros. Sus restos fueron identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) en 2010 y exhumados en el Cementerio del Norte, en San Miguel de Tucumán. Los abuelos de Juan, José Ramón Morales y Toribia Del Tránsito Romero, y un tío llamado Julio César Morales también fueron secuestrados y permanecen desaparecidos.
Cerramos el año con más verdad. Las Abuelas recuperaron otro nieto, el 132. La restitución de la identidad de cada uno de ellos genera profunda emoción y alegría. Gracias por esta lucha incansable, queridas Abuelas, escribió el presidente Alberto Fernández.
”¡Las Abuelas lo hicieron de nuevo! Gran alegría por la restitución de la identidad de otro argentino, el nieto 132,″ expresó la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner (CFK) en las redes sociales.
Carlotto había anunciado el 22 de diciembre el hallazgo del hijo de Lucía Angela Nadín y del mendocino Aldo Hugo Quevedo, quienes militaron en la guerrilla del PRT ERP bajo los nombres de guerra de Chiquita y Dipy.
Tras la detención de un compañero de trabajo en mayo de 1976, Lucía y Aldo se trasladaron a Buenos Aires. Entre septiembre y octubre de 1977, cuando Lucía estaba embarazada de unos tres meses, ambos fueron secuestrados.
El Nieto Nº 130 había sido encontrado el 10 de junio de 2019.