Un nuevo motín en una cárcel de Ecuador en la noche del lunes ha dejado al menos cinco reclusos muertos y otros seis heridos en el centro penitenciario de Pichincha, en Quito, también conocido como El Inca, donde están alojados unos 1.365 internos.
También sufrió heridas un guardia de la prisión, según se informó.
El Servicio Nacional de Atención Integral al Adulto Privado de Libertad de Ecuador explicó que el conflicto se originó por un enfrentamiento entre dos facciones rivales. Según el general de la policía Víctor Herrera, los presos se atacaron mutuamente con cuchillos y otros instrumentos punzantes.
Los enfrentamientos serían el resultado de disputas por el control de rutas y territorios para la distribución nacional e internacional de drogas. Las cárceles estatales de Ecuador han sido en los últimos años el campo de batalla de grupos rivales, algunos de ellos vinculados a los cárteles de la droga colombianos y mexicanos.
La semana pasada, una fuerza militar irrumpió en la Penitenciaría del Litoral y logró recuperar el establecimiento que había caído en manos de reclusos armados con granadas y fusiles. Tras el suceso, más de 2.000 presidiarios fueron reubicados en otras cárceles del país.
En lo que va de 2022, unos 120 reclusos han sido asesinados en distintos levantamientos.
Las autoridades ecuatorianas informaron este martes que se encontraron 178 cuchillas en requisas en la cárcel de El Inca, en Quito, tras la pelea del lunes entre las bandas de Los Ñetas y Los Lobos. Los agentes penitenciarios también encontraron 465 dosis de alcaloides, 40 teléfonos móviles y dinero en efectivo.
Más tarde se desmintieron rumores sobre un motín en la cárcel de Cotopaxi, aunque se activaron los protocolos de seguridad y se comprobó que las actividades se desarrollan con normalidad.
El presidente Guillermo Lasso volvió a elogiar la labor de la Policía ecuatoriana a través de Twitter.