El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, participó este viernes de la ceremonia de conmemoración del 50º aniversario de la llamada tragedia de los Andes, un accidente aéreo que hizo historia ya que muchas víctimas sobrevivieron tras ser dadas por muertas.
Durante la celebración en el Museo Andes 1972, el Correo uruguayo lanzó un sello postal conmemorativo y el Banco Central del Uruguay (BCU) anunció que acuñará 5.000 monedas alusivas.
También estuvieron presentes en el acto varios altos funcionarios del gobierno junto con el director del Museo, Jörg Thomsen, así como algunos de los supervivientes del vuelo 591 de la Fuerza Aérea Uruguaya, como Gustavo Zerbino, Fernando Parrado, Eduardo Strauch y Roberto Canessa.
Las autoridades del BCU indicaron que las monedas de UY$ 1.000 (US$ 24,5) deben ser entregadas en el primer semestre de 2023, mientras que la estampilla fue matasellada por el presidente Lacalle Pou.
El 13 de octubre de 1972, miembros del club de rugby Old Christians y algunos de sus familiares viajaron desde Montevideo a Santiago de Chile para jugar un partido amistoso. Mientras cruzaban la Cordillera de los Andes, el avión turbohélice Fairchild F227, en el que viajaban 40 pasajeros y cinco tripulantes, se estrelló contra un acantilado de la cordillera. Sólo 16 supervivientes fueron rescatados más de dos meses después, mientras que 29 personas murieron.
El museo también celebró sus primeros 10 años con la memoria preservada para difundir valores clave como la solidaridad, el trabajo en equipo y la resiliencia. Thomsen señaló que esta década de actividad está marcada por el debido homenaje a las 45 personas del vuelo y para que la memoria de las 29 que no pudieron volver se conserve y mantenga en el tiempo.
Los fallecidos están presentes en forma de cartas y objetos que dan alma a este museo; los objetos de muchos de ellos hablan por sí mismos, explicó.
”La frase de Arturo Nogueira 'La vida es dura, pero merece ser vivida incluso en el sufrimiento', (dicha por) un joven que murió 15 horas después de haberla escrito y con 35 días de agonía, creo que es muy representativa de lo que lograron sobrevivir y vivir, dijo Thomsen.
El museo es un justo homenaje a esas 45 personas que iban a bordo”, dijo Thomsen sobre el lugar frecuentemente visitado por los turistas donde se exponen réplicas del avión, fotografías y ropa original de los supervivientes.
Durante la ceremonia, el artista británico John Guiver presentó su libro sobre la tragedia: Para jugar el juego.