Grupos de sobrevivientes, estudiantes y otras organizaciones de derechos humanos conmemoraron este viernes el 46º aniversario de la masacre conocida como La Noche de Los Lápices en la ciudad argentina de La Plata, donde se perpetraron las atrocidades cometidas por la dictadura militar.
A 46 años, estar en La Plata, donde las paredes me hablan y las calles me traen las ausencias, pero rodeada de tantos jóvenes y banderas es reparador, es un buen homenaje y una buena oportunidad para hablar del pasado en nuestro presente, dijo a Hoy la sobreviviente Emilce Moler.
También señaló que el tema ha sido debatido con las nuevas generaciones para que no vuelva a suceder, para que las diferencias políticas no vuelvan a dirimirse a través de las armas.
A partir del 16 de septiembre y durante los días siguientes, los grupos terroristas del Estado secuestraron y condujeron a los centros clandestinos de detención a los estudiantes que reclamaban una tarifa especial de autobús para estudiantes. Las víctimas fueron torturadas durante semanas.
El movimiento estudiantil de la provincia de Buenos Aires sale a marchar porque no queremos que vuelvan a ocurrir hechos terroríficos como los que les sucedieron a nuestros compañeros de la Noche de los Lápices. Queremos un país libre, con independencia económica y soberanía política, dijo Candela Coletti, según Hoy.
El medio platense también citó a Nadya Loscoco: es fundamental por la dimensión simbólica, hace unos días le querían pegar un tiro en la cara a Cristina Kirchner, el vínculo histórico es más fuerte.
Es una convocatoria masiva porque los sueños no están proscritos. La ciudad de La Plata fue el epicentro y mientras discutimos la democracia, empoderar la convocatoria fue parte de las definiciones del movimiento estudiantil, agregó.
El sobreviviente Pablo Díaz recordó con orgullo que hoy millones de estudiantes utilizan el boleto de bus por el que ellos lucharon: Hoy más de 5 millones de adolescentes usan el boleto estudiantil, fue la conquista de un sindicato, un derecho social y económico.
Tenemos que seguir construyendo el Nunca Más porque algunos proponen la violencia y el odio; los adolescentes tienen que sacar la sensibilidad social y el amor que tiene por sí mismo, agregó.
(Fuente: Hoy)